
12/06/2025
✨Los niños reflejan lo que viven.
Y no solo lo bueno... también lo difícil, lo tenso, lo que duele.
Un niño que crece entre gritos, aprende a gritar.
Un niño que crece con respeto, aprende a respetar.
Un niño que recibe amor, aprende a amar.
Pero uno que recibe indiferencia, aprende a no confiar.
Todo lo que decimos, hacemos o dejamos de hacer, deja huella.
Ellos no solo nos escuchan... nos observan, nos sienten y nos imitan.
Por eso, criar desde el amor no es solo dar abrazos y palabras bonitas:
Es también poner límites con respeto, validar sus emociones, y enseñarles a través del ejemplo.
Porque educar no es moldear, es acompañar.
Y los niños que se sienten seguros y amados, florecen.
👩⚕️ Como pediatra, lo veo todos los días:
la salud emocional también se construye en casa.