
30/05/2025
Empujar a una persona al límite, provocarla, desgastarla, y luego señalarla como “la conflictiva” o “la que reacciona mal”, es una forma muy sutil —pero profundamente dañina— de manipulación.
Desde la psicología holística, reconocemos que cada reacción tiene una raíz emocional. Cuando alguien estalla, probablemente ha estado conteniendo demasiado durante demasiado tiempo.
🌿 No se trata de justificar el daño, sino de comprender los procesos.
🌿 Acompañar con empatía, límites y conciencia.
🌿 Sanar es aprender a reconocer dinámicas tóxicas… incluso las más silenciosas.
💬 ¿Te has sentido alguna vez en esta situación? Te leo.