Psicóloga Daniela Brenes

Psicóloga Daniela Brenes Consultorio de Psicología: Terapia psicológica, evaluación psicodiagnóstica, evaluación psicoeducativa.

Las distorsiones cognitivas no son simples pensamientos negativos.Son interpretaciones automáticas que aparecen con carg...
23/07/2025

Las distorsiones cognitivas no son simples pensamientos negativos.
Son interpretaciones automáticas que aparecen con carga emocional y se sienten verdaderas… pero eso no las hace precisas.

Generalmente, se activan como respuestas aprendidas —y muchas veces no revisadas— a experiencias marcadas por inseguridad, crítica o falta de validación.

Pensamientos como:
• “Si no lo hago perfecto, no vale.” → Pensamiento dicotómico (todo o nada)
• “Seguro están decepcionados de mí.” → Lectura mental (atribuir sin evidencia)
• “Siempre arruino todo.” → Sobregeneralización
• “No soy suficiente.” → Descalificación de lo positivo o etiquetado global

Estas ideas no definen quién sos.
Son patrones que tu mente automatizó para protegerte de posibles errores o rechazos, pero que hoy pueden estar afectando tu bienestar.

Desde lo clínico, entendemos que estas cogniciones activan esquemas disfuncionales de autovaloración. Y cuando se sostienen en el tiempo, tienden a reforzar ciclos de evitación, ansiedad o desregulación emocional.

Aprender a identificarlas, cuestionarlas y transformarlas no es pensar “positivo”.
Es desarrollar flexibilidad cognitiva: la capacidad de observar tus pensamientos sin quedarte atrapad@ en ellos, y elegir respuestas más coherentes con lo que realmente te importa.

Pero el cambio no termina ahí.
También requiere mirar lo que hay detrás de esos pensamientos: tus creencias intermedias y nucleares.

🔹 Las creencias intermedias son suposiciones o reglas internas como:
• “Si no hago todo perfecto, me van a rechazar.”
• “Tengo que encargarme de todo yo.”
No siempre son visibles, pero influyen en tu forma de pensar, decidir y reaccionar.

🔹 Las creencias nucleares van más profundo:
• “No soy suficiente.”
• “No merezco ser amado.”
Suelen originarse en experiencias tempranas y, aunque hoy no se ajusten a tu realidad, siguen operando como si fueran verdades absolutas.

Trabajar sobre estas capas no solo cambia lo que pensás.
Cambia cómo te hablás, cómo te tratás y cómo te posicionás en el mundo.

Sanar también es eso: revisar tu diálogo interno y reconstruir la forma en que te relacionás con vos mism@.

Las distorsiones cognitivas no son simples pensamientos negativos.Son interpretaciones automáticas que aparecen con fuer...
21/07/2025

Las distorsiones cognitivas no son simples pensamientos negativos.
Son interpretaciones automáticas que aparecen con fuerza emocional y se sienten reales, pero que no necesariamente son precisas.
Surgen como respuestas aprendidas, y muchas veces no actualizadas, ante experiencias pasadas marcadas por inseguridad, crítica o invalidación.
Se trata de pensamientos como:
“Si no lo hago perfecto, no vale.” → Pensamiento dicotómico (todo o nada).
“Seguro están decepcionados de mí.” → Lectura mental (atribuir sin evidencia).
“Siempre arruino todo.” → Sobregeneralización (ampliar una situación a todas).
“No soy suficiente.” → Descalificación de lo positivo o etiquetado global.

Estas distorsiones no definen tu identidad.
Son el resultado de aprendizajes previos que tu mente automatizó para “prevenir errores”, pero que hoy pueden limitar tu bienestar. En el marco clínico, se entiende que estas cogniciones activan esquemas disfuncionales de autovaloración, y muchas veces mantienen ciclos de evitación, ansiedad o desregulación emocional.

Aprender a identificarlas, cuestionarlas y transformarlas no es solo pensar “positivo”:
es desarrollar flexibilidad cognitiva, una habilidad que permite evaluar tus pensamientos sin fusionarte con ellos, y construir respuestas más coherentes con tus valores actuales.

Pero incluso el cambio no se queda ahí.
También implica mirar lo que hay detrás de esos pensamientos:
tus creencias intermedias y nucleares.

🔹 Las creencias intermedias son reglas o suposiciones aprendidas, como:
• “Si no hago todo perfecto, me van a rechazar.”
• “Tengo que encargarme de todo yo.”
No siempre las notás, pero están activas en el fondo y moldean tu diálogo interno.

🔹 Las creencias nucleares son ideas más profundas sobre vos mism@, como:
• “No soy suficiente.”
• “No merezco ser amado.”
Estas creencias suelen originarse en experiencias tempranas y se sienten como verdades absolutas, aunque muchas veces ya no se ajustan a tu realidad actual. Trabajar sobre estas capas no solo cambia lo que pensás: cambia cómo te hablás, cómo te tratás y cómo actuás en el mundo.

Sanar también es eso: reconstruir la forma en que pensás y te posicionás frente a vos mism@.

¿Y si no soy suficiente para lo que sueño?Esa pregunta, incluso cuando no se dice en voz alta, puede frenar más de lo qu...
18/07/2025

¿Y si no soy suficiente para lo que sueño?
Esa pregunta, incluso cuando no se dice en voz alta, puede frenar más de lo que parece.
No porque no quieras avanzar, sino porque algo en vos anticipa que no vas a poder sostenerlo.

Y no, no siempre es miedo a fracasar.
A veces es miedo a que te salga bien.
A no sentirte a la altura.
A que alguien note que no eras “tan capaz”.
A tener algo importante… y perderlo.

📌 Eso se llama evitación experiencial encubierta:
evitar emociones internas difíciles —como vergüenza, insuficiencia o exposición— a través de conductas como la procrastinación, la duda constante o la necesidad de estar “un poco más preparad@”.

📌 También puede mostrarse como autoduda anticipatoria: esa ansiedad de desempeño que no se activa por algo que pasa afuera, sino por las imágenes que tu mente proyecta hacia adelante.

📌 Y si hubo mucha exigencia emocional en tus vínculos tempranos, es posible que hoy sientas que tu valor depende de rendir, no de estar bien.

Pero avanzar no es no tener miedo.
Es poder moverte incluso con miedo, sin que esas dudas definan tus decisiones.
Porque la seguridad emocional no nace del control,
sino de desarrollar autoeficacia percibida: esa confianza en que vas a poder acompañarte, aun cuando el camino no sea claro.

✨ No tenés que demostrar nada para merecer lo que deseás.
Podés empezar con dudas.
Y también podés aprender a sostener eso que antes pensaste que era “demasiado” para vos.

No todos los traumas vienen de algo que se ve.A veces se forman en lo que no se nombra.En el día que te ridiculizaron, t...
16/07/2025

No todos los traumas vienen de algo que se ve.
A veces se forman en lo que no se nombra.
En el día que te ridiculizaron, te ignoraron o te hicieron sentir que no podías ser vos.
Esas experiencias emocionalmente no reconocidas —vividas sin contención ni respuesta compasiva— dejan una marca.

📌 Lo que ocurre ahí es una internalización del dolor emocional sostenido.
Y con ella, se instalan aprendizajes emocionales disfuncionales, como:
• “No merezco ser escuchad@.”
• “Tengo que callarme para ser querid@.”
• “Si muestro lo que siento, me van a rechazar.”

Con el tiempo, ese aprendizaje se transforma en estrategias de regulación que buscan protegerte, pero terminan aislándote:
• Hiperindependencia
• Miedo al conflicto
• Necesidad constante de agradar
• Ansiedad que no parece tener causa
• Desconexión emocional

Y muchas veces, lo que más dolió no fue lo que pasó, sino haberlo vivido en soledad.
Sin una presencia emocional segura.
Eso no te rompió. Pero sí pudo dejarte sin recursos.
Y hoy, esos recursos se pueden construir.

✨ Validar lo que sentiste no es revivirlo.
Es resignificarlo.
No todo lo que dolió tiene que doler para siempre.

Podés reconstruir una relación segura con vos mism@,
desde la compasión, la regulación emocional y el acompañamiento clínico.

A veces no se trata de si lo vas a lograr o no.Se trata de cómo te enseñaron a procesar la posibilidad de que algo bueno...
14/07/2025

A veces no se trata de si lo vas a lograr o no.
Se trata de cómo te enseñaron a procesar la posibilidad de que algo bueno te pase.

El miedo al éxito no siempre nace de la duda o de la ambición.
Muchas veces nace en entornos donde recibir, destacar o desear era algo incómodo, excesivo o mal visto.
Donde había que no molestar, no brillar demasiado, no llamar la atención.

Y si creciste así, con ese tipo de invalidación sutil, tu sistema emocional aprendió que era más seguro no sobresalir.
No porque no lo desearas…
sino porque hacerlo podía implicar quedarte sin vínculo, ser criticad@ o rechazad@.

Entonces, cuando estás cerca de algo que realmente querés, se puede activar un patrón de regulación emocional condicionada:
🤍 ¿Y si me va bien y pierdo conexión con los demás?
🤍 ¿Y si no puedo sostenerlo?
🤍 ¿Y si ya no me reconocen?

No es que no estés list@.
Es que estás empezando a construir una vida que no se parece a lo que te enseñaron que era posible.

Y eso no se resuelve solo con querer.
Se atraviesa. Con tiempo, con cuidado, y con acompañamiento.

A veces te alejás antes de que duela.Cortás antes de que se complique.No decís lo que sentís por miedo a que no sea recí...
11/07/2025

A veces te alejás antes de que duela.
Cortás antes de que se complique.
No decís lo que sentís por miedo a que no sea recíproco.
Y sentís que eso te protege…
pero en el fondo, también te está alejando de lo que querés.
De la conexión real. De la posibilidad de sentirte visto. De la autenticidad.

Esto se entiende como evitación experiencial relacional:
una forma de prevenir el dolor anticipado —como el rechazo, la vergüenza o la exposición emocional— evitando aquello que también deseás.
Pero el costo de evitar no es solo lo que no duele…
es también todo lo que no llega.

Estas reacciones suelen estar asociadas a esquemas de apego inseguro.
Es decir, experiencias tempranas donde mostrarse, abrirse o confiar no fue seguro.
Y entonces, incluso cuando hoy tenés delante algo distinto, el sistema de amenaza se anticipa.
No distingue si es real. Solo reconoce la sensación.

🤍 Parte del proceso terapéutico es aprender a quedarte, a confiar, a abrirte…
sin que eso implique exponerte al mismo dolor de antes.

Y sí, es posible.

No se trata solo de voluntad.
Es un trabajo de fondo: reentrenar tu sistema emocional para que entienda que hoy, en este presente, puede ser seguro quedarte donde hay cuidado.

Y eso —como todo lo aprendido— también puede cambiarse.

A veces, la ansiedad aparece justo cuando todo parece estar en calma.Y no, eso no significa que estés haciendo algo mal....
09/07/2025

A veces, la ansiedad aparece justo cuando todo parece estar en calma.
Y no, eso no significa que estés haciendo algo mal.
Significa que tu sistema todavía está intentando sentirse seguro.

🧠 Desde la psicología clínica, esto se conoce como ansiedad anticipatoria:
una activación emocional que no nace en lo que está pasando ahora,
sino en asociaciones internas, memorias, creencias o aprendizajes previos, que siguen activas, incluso si no sos del todo consciente de ellas.

Cuando tu sistema nervioso ha pasado mucho tiempo en hipervigilancia sostenida, la calma puede sentirse sospechosa.
Tu mente se anticipa, tu cuerpo se prepara para defenderse, y sin darte cuenta, empezás a esperar que algo salga mal… aunque hoy no haya nada que lo justifique.

Eso no es irracional.
Es una respuesta lógica a un patrón aprendido de protección.
Y lo aprendido, por más automático que parezca, puede reentrenarse.

💬 Si te sentís así, no estás sol@.
No estás fallando.
Estás condicionado… y eso sí se puede trabajar.

📲 Si querés empezar a entender lo que te pasa con más claridad y sin juicio, podés agendar tu espacio.

Hay días en los que vas a avanzar con claridad.Y otros en los que solo vas a poder respirar.Ambas cosas son válidas.El c...
07/07/2025

Hay días en los que vas a avanzar con claridad.
Y otros en los que solo vas a poder respirar.
Ambas cosas son válidas.

El cambio no sigue una línea recta ni un ritmo perfecto.
Las subidas y bajadas en motivación, energía o foco no son retrocesos:
son parte del proceso de adaptación interna.

🧠 Compararte con una línea de tiempo externa, como si hubiera un ritmo “correcto”,
es caer en fusión con estándares arbitrarios, no con tus valores reales.

Dejar de exigirte inmediatez no es rendirse.
Es regularte. Es responderte con más criterio que castigo.

Estás haciendo lo que podés con lo que hoy tenés disponible.
Y eso, aunque a veces pase desapercibido,
es un acto de compasión hacia vos mism@ frente al juicio interno que te quiere empujar todo el tiempo.

A veces, el problema no es la comida, sino lo que hay detrás: una emoción que no supiste cómo nombrar, un intento de con...
04/07/2025

A veces, el problema no es la comida, sino lo que hay detrás: una emoción que no supiste cómo nombrar, un intento de controlar lo que se sentía incontrolable.
La culpa después de comer, el miedo a equivocarte con tu cuerpo o tu imagen… no surgen de la comida en sí, sino de un malestar emocional más profundo.

📖 Desde la psicología clínica, entendemos que los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) rara vez empiezan por la comida.
Las conductas visibles —como la restricción, la culpa o la comparación constante— son intentos de regular emociones difíciles, de crear estructura frente al caos interno.

Lo que parece autocuidado puede estar sostenido por perfeccionismo, miedo o una autoestima frágil que depende de “hacerlo bien”.

Incluso lo que se ve como saludable puede volverse parte del problema, si está guiado por el miedo y no por el bienestar.

Intervenir no es solo cambiar lo que se hace, sino entender por qué se hace.
Porque no es el cuerpo el que necesita corrección, es el dolor emocional el que necesita ser visto, comprendido e integrado.

A veces nos quedamos donde no nos sentimos bien, solo porque aprendimos a llamar “amor” a algo que, en realidad, es la r...
02/07/2025

A veces nos quedamos donde no nos sentimos bien, solo porque aprendimos a llamar “amor” a algo que, en realidad, es la repetición de nuestros esquemas afectivos más antiguos.

Eso que parece elección, muchas veces es solo la activación de aprendizajes históricos de vinculación disfuncional: patrones relacionales que se instalaron desde temprano y que, aunque se sienten familiares, no necesariamente te hacen bien.

Lo que muchas personas llaman “trauma vincular”, aunque no sea un término clínico formal, suele describir ese tipo de experiencia: afecto condicionado, donde hay que esforzarse, adaptarse o ceder para sentirse querido.

💔 Pero el amor auténtico no pide que te traiciones.
No te apaga. No te hace sentir invisible.

Preguntate, con honestidad:

👉 ¿Te sentís verdaderamente amad@… o necesitás sentirte necesari@?
👉 ¿Estás eligiendo… o repitiendo lo que aprendiste sin darte cuenta?

Lo que dolió no fue amar.
Fue haberlo hecho sin límites funcionales: esa capacidad de protegerte sin desconectarte, de cuidarte sin dejar de estar.

Y sí, salir de esos esquemas no es simple.
Están sostenidos por años de aprendizaje, miedo y deseo de pertenecer.
Pero eso no significa que no se puedan cambiar.

🔒 Poner límites también es un acto de amor. Pero esta vez, hacia vos.

¿Sentís que no estás haciendo lo suficiente? Que te estás quedando atrás…Esa sensación tiene un nombre conocido: FOMO (f...
30/06/2025

¿Sentís que no estás haciendo lo suficiente? Que te estás quedando atrás…
Esa sensación tiene un nombre conocido: FOMO (fear of missing out).
No es un término clínico, pero describe algo que aparece seguido en consulta.

Desde la psicología, se entiende como una forma de comparación social negativa que puede activar ansiedad anticipatoria, desregulación emocional y un patrón de autoevaluación crítica constante.

Y sí, en redes sociales se vuelve más difícil:
vemos logros, viajes, cuerpos editados, relaciones idealizadas…
y empezamos a mirar nuestra vida con la lupa equivocada.

📍 Pero tu vida no necesita validación externa para tener valor.
📍 Y tu proceso no tiene que parecerse al de nadie para ser legítimo.

🔄 Volvé a tu realidad interna:
✔️ Pausá el scroll.
✔️ Practicá gratitud (una estrategia con respaldo clínico que ayuda a reconectar con lo que sí está presente).
✔️ Redefiní tus referencias: volvé a tus valores, a lo que te hace sentido más allá del algoritmo.

💬 Esto no es falta de motivación.
Es una desconexión progresiva, y sí: tiene abordaje psicológico.

No te estás quedando atrás.
Solo necesitás dejar de mirar hacia afuera… y empezar a mirarte con claridad.

Acompaño a personas que, al igual que yo, han descubierto que no se trata de hacer menos, sino de hacerlo desde otro lug...
23/06/2025

Acompaño a personas que, al igual que yo, han descubierto que no se trata de hacer menos, sino de hacerlo desde otro lugar: con regulación, estrategia y cuidado interno.
Porque el bienestar no es una pausa: es la base de todo lo que construís.
Estás agotado, no fracasando.

Ese cansancio que arrastrás no es falta de voluntad.
Cuando trabajás por cuenta propia, pareciera que tenés que estar disponible 24/7, decirle que sí a todo y sostenerlo todo.
Pero no se trata de resistir más, se trata de empezar a cuidarte sin culpa ni justificación.

Si sentís desconexión, irritabilidad o fatiga constante, no lo ignores.
Tu cuerpo te está hablando.

Dirección

Clínica Alena, Santa Verde
Heredia
40305

Notificaciones

Sé el primero en enterarse y déjanos enviarle un correo electrónico cuando Psicóloga Daniela Brenes publique noticias y promociones. Su dirección de correo electrónico no se utilizará para ningún otro fin, y puede darse de baja en cualquier momento.

Contacto El Consultorio

Enviar un mensaje a Psicóloga Daniela Brenes:

Compartir

Categoría