15/08/2025
Alguien dijo una vez que una forma de comprender el universo es volver a lo básico, a las pequeñas estructuras que lo sostienen.
"Si quieres entender una galaxia, comienza por entender un átomo".
En las clases de biología aprendimos que, cuando se unen un óvulo y un espermatozoide, este último ya ha perdido sus mitocondrias.
Así, todas las mitocondrias de nuestras células provienen de una mujer: de esa mujer a la que llamamos mamá.
Las mitocondrias son diminutas organelas donde se procesa la energía que nos mantiene vivos: allí respira cada célula, allí se sostiene la economía secreta de nuestro cuerpo.
Cada fibra que nos mueve y cada latido de nuestro corazón dependen de ellas.
Gracias, mamá, porque desde lo más elemental y biológico que la naturaleza te asigna, hasta el trabajo y el amor infinitos que entregas, lo asumes todo sin descanso.
Esta misión que empieza al llevarnos nueve meses y que se prolonga cuidándonos cada día.
La grandeza de cada nacimiento, la belleza de cada detalle.
Desde nuestras estructuras más elementales hasta todos tus roles multifuncionales:
todo nace por vos, todo se mueve por vos,
vidas enteras progresan e inspiran gracias a vos.
De todos los que formamos parte de Vivit Salud
Feliz día, mamá