21/08/2025
Volver a escribir tomó tiempo. Hoy inicio desde el corazón, no desde el orden previsto, sino desde lo que pide el alma: Aparigraha.
¿Qué son los Yamas y Niyamas?
El Yoga, como la herramienta de transformación humana que es, descansa sobre una profunda y extensa base filosófica, es como una gran caja de herramientas, muy sofisticadas, cada una con un fin específico. Allí encontramos los Yamas y Niyamas, éstos son códigos éticos o prácticas que nos sirven de guía para tener una relación más consciente y plena con lo que nos rodea y con nosotros mismos.
Iniciaremos con los Yamas, primera de las ocho ramas del Yoga, que nos provee la guía para vivir en sociedad de forma más consciente y plena. Aplicarlos no sólo genera un ambiente positivo a nuestro alrededor sino que nos permite disfrutar de paz interior y relaciones más sanas, auténticas y profundas.
Ambos, Yamas y Niyamas son herramientas de uso personal, un espejo hermoso en el que nos reflejaremos con total honestidad. *Nunca una lupa para examinar a los demás.*
Aparigraha: desapego, es el quinto yama, el último. Inicio por éste porque siento, es lo más honesto que puedo hacer, estoy en ese proceso de soltar y muchos de ustedes, quienes vienen a practicar, me han acompañado en esta experiencia.
Aparigraha es soltar para volver a uno mismo.
Desde el camino del Yoga la vida va adquiriendo colores diferentes, matices diferentes. No es una renuncia fría, es una alquimia silenciosa, que muchas veces se comparte con nuestra propia compañía. Nos enseña que soltar no es perder sino permitir que lo esencial permanezca y, más allá de eso, florezca.
Muchas veces el corazón se aferra, a Seres profundamente amados, a historias, a lo que creíamos o queríamos eterno, a una historia o a imágenes de lo debería ser o queríamos lograr. Cuando la vida nos pide dejar ir, el dolor parece no solo inmenso sino que infranqueable, eso es apego. Sin embargo, si observamos, habitamos y transitamos ese dolor con consciencia, puede develarnos una fortaleza y resiliencia que hasta ese momento era desconocida.
Desapegarse no es olvidar. Es transformar... Es transformarse...
- Es amar sin necesidad de poseer.
- Es agradecer lo vivido sin exigir que se repita.
- Es permitir que el vacío hable, y escuchar con atención lo que nos quiere decir.
- Es confiar en que lo que se va, deja espacio para lo que somos.
El desapego es un acto de profunda compasión y amor por nosotros mismos y por los demás. Nos libera del miedo, nos devuelve al presente, nos recuerda que la paz no está en retener, sino en fluir.
Como me dijo un Ser al que amo profundamente "el fuego de tu corazón está encendido, así no lo veas" Es desarrollar paulatinamente la capacidad de ver y sentir ese fueguito que quizá hoy no estemos viendo pero que reside dentro. Es el primer paso hacia la paz interior, es recordar que el crecimiento espiritual y la transformación nacen cuando dejamos ir desde un espacio de compasión y amor y nos damos la oportunidad de avanzar con ligereza, sin el peso de lo que siempre fue libre y ya no está en el plano material.
Si hoy estás atravesando una despedida, una pérdida, una transformación… respirá. No estás solo. Cada lágrima puede ser semilla. Cada adiós, un nuevo comienzo.
Que tu práctica te sostenga. Que el silencio te abrace. Que el dolor se convierta en luz.
Hoy cada palabra es una ofrenda para vos, mi querido Nandi. Gracias por ser mi gran Maestro del Desapego y por enseñarme que el verdadero amor no se retiene, se honra...