03/10/2024
Por alguna extraña razón a lo largo de nuestra vida, tanto en la casa, escuela, trabajos,nos han enseñado a comunicarnos y lidiar con los demás,a tener educación,empatía, preocupación,como demostrar compañerismo, como ser buen o buena amiga. Es como que si siempre todo se tratara de lo externo cuando la realidad es que tratamos a los demás, y podemos tener la capacidad de estar, trabajar y ser, en la medida que estamos en sintonía con nosotros mismos.
En la medida que conectamos con lo externo nos desconectamos un poco de nosotros, de nuestro sentido de hambre, de sed, de cansancio, andamos perdidos con las emociones y las dejamos salir a lo loco creando a veces caos, o no las dejamos salir y nos enfermamos.
Somos capaces de ver a un bebe irritable y llorando y saber que tiene sueño o que tiene hambre pero a veces andamos botando chispas y no sabemos identificar que no dormimos bien anoche o que el compañero de trabajo esta chupandote la energía o que tu jefe o tu pareja te maltratan.
Comemos el desayuno porque es la hora del desayuno o el almuerzo o la cena a veces sin tener una pizca de hambre. Nos pasa el día sin tomar una gota de agua, sentimos tristeza y la confundimos con hambre y nos metemos un camion de comida, las rodillas te suenan como carro viejo y no piensas que el cuerpo te pide estirarte o moverte hasta que se te mete un calambre imposible de ignorar.
Te sube la tension arterial y no te das cuenta, la tiroides se te aloca y se te cae el pelo y nos damos cuenta en un análisis casual, las hormonas te van arrastrando por la vida y lo descubrimos un día que te da un yeyo en la oficina y en la emergencia te lo informan.
La anemia te tiene como zombie, la falta de vitamina D te tiene los ánimos en el piso, subes de peso de un día para otro y piensas que es solo la edad o que comiste mal esa semana, no puedes dormir y piensas que fue el cafe pero no el estrés que te calcome.
Háblate, pregúntate, consuelate, llévate al médico, abrazate, cocinate, siéntate contigo, haz las pases con tu cuerpo y comienza a escuchar. Hazte experta/to en ti.