
01/07/2025
Ser adulto te permite ver a tus padres con nuevos ojos.
Y también sanar lo que no se resolvió en la infancia.
Tal vez no recibiste todo lo que necesitabas.
Tal vez hoy tienes preguntas, heridas o vacíos.
Y también la oportunidad de resignificar tu historia.
Reparar no siempre significa confrontar.
A veces significa comprender, soltar o poner límites.
En el Centro KFA, acompañamos esos procesos con compasión y estructura.