05/10/2024
Gripas, paciencia y jarabes
La historia natural de un catarro, puede involucrar varios días para tener su curación total, la bronca es que cuando un niño ingresa a guardería o escuela, constantemente está expuesto a virus, esto hace que cuando se va curando y lo volvemos a llevar, un compadrito de escuela nuevamente le compartirá otro bicho y así sucesivamente; esta situación hará probar la paciencia de cualquier persona, a veces hay que entender que un niño de escuela vive un poco con mocos y toses ocasionales, y si su estado general es bueno poco hay que ofrecer, la hidratación y la limpieza nasal juegan un papel clave en su tratamiento (y la paciencia también).
Ante tanto moco y tos, existen una gran variedad de jarabes y menjurjes, los invito a ir a una farmacia y vean el anaquel de productos para catarro y tos, entenderán lo que les digo, pero, ¿por qué hay tantas opciones?, ¿no debería sólo haber una opción válida ante el mismo problema?, y la respuesta es compleja, pero al haber una gran cantidad de virus que nos producen infecciones de vías respiratorias, nunca habrá un tratamiento específico, el tiempo siempre será clave para su resolución, y tal vez ahí radique el problema, la vida es cada vez más acelerada, los niños deben volver pronto a sus actividades (ya pagué la natación….pagué la escuela para que vaya dos dias al mes…se escucha por ahí), sentimos incomodidad al ver a nuestros hijos llenos de mocos y queremos hacer algo ”mágico” para que se apuren a curarse; de ahí, de esa ilusa prisa se llenan los anaqueles de jarabes y remedios, que muchas veces ayudan más a calmarnos a nosotros, que a acelerar un proceso natural que durará unos días.
Recordemos siempre que lo importante es vigilar cómo está el estado general de nuestro pequeño, si está activo, contento, toma líquidos, y anda echando relajo normal, tal vez poco debamos intervenir excepto por limpiar nariz e hidratar, los jarabes poco ayudarán; de lo contrario si vemos a nuestro hijo con los ánimos bajos, sin echar relajo, probablemente debamos acudir a nuestro médico de confianza para que le eche un ojo.
Animo que viene el ❄️ y los 😪.
Isaac Jiménez Covarrubias