19/03/2025
Estimados amigos, hoy quiero hablarles sobre un tema que, para muchos, puede resultar más interesante, especialmente para quienes no son psicólogos: el amor. A menudo abordado desde las artes y con menos frecuencia desde la ciencia, este concepto suele estar rodeado de cursilería y lugares comunes.
¿AMOR O APEGO? ¿QUÉ NOS DICE LA PSICOLOGÍA?
El amor y el apego son dos conceptos que, aunque estrechamente relacionados, no son equivalentes. Desde la psicología, ambos se han estudiado ampliamente para comprender su influencia en las relaciones interpersonales. Mientras que el amor es un fenómeno complejo que involucra emociones, cogniciones y comportamientos, el apego hace referencia a la forma en que las personas se vinculan afectivamente con los demás. Dentro de los estilos de apego, el apego seguro se asocia con relaciones saludables, pero ¿es sinónimo de amor?
La teoría del apego, formulada por John Bowlby (1969) y expandida por Hazan y Shaver (1987) en el contexto de las relaciones adultas, sostiene que la forma en que los individuos establecen vínculos en la infancia influye en su manera de amar en la adultez. Existen tres estilos principales de apego: seguro, ansioso y evitativo. El apego seguro se caracteriza por la confianza y la capacidad de establecer relaciones íntimas sin miedo al abandono, mientras que el ansioso y el evitativo pueden generar inestabilidad emocional en las relaciones.
Por otro lado, el amor es un fenómeno más amplio y diverso. Robert Sternberg (1986) propuso la "teoría triangular del amor", donde identifica tres componentes fundamentales: intimidad, pasión y compromiso. La combinación de estos elementos da lugar a distintos tipos de amor, desde el amor romántico hasta el amor compañero o consumado. Además, la investigación en neurociencia (Fisher et al., 2016) ha demostrado que el amor activa regiones del cerebro relacionadas con la recompensa y la motivación, reforzando la idea de que es un proceso con bases biológicas.
Si bien un apego seguro facilita el desarrollo de relaciones amorosas saludables, el amor puede existir sin un apego seguro. Es decir, una persona con apego ansioso o evitativo también puede experimentar amor, pero este estará mediado por patrones de inseguridad o evitación emocional. Además, el amor no se limita a las relaciones de pareja, sino que abarca vínculos familiares, amistosos y hasta filantrópicos, lo que lo diferencia del apego, que está más vinculado a la necesidad de seguridad en la relación.
El amor y el apego seguro no son sinónimos, aunque pueden complementarse en relaciones saludables. El apego seguro permite una expresión del amor más equilibrada, pero el amor trasciende la dimensión del apego, incluyendo una variedad de experiencias emocionales y cognitivas. Comprender esta diferencia es fundamental para mejorar las relaciones interpersonales y fomentar vínculos afectivos más sanos y satisfactorios.