16/06/2020
𝐓𝐫𝐨𝐦𝐛𝐨𝐬𝐢𝐬 𝐩𝐨𝐫 𝐚𝐧𝐭𝐢𝐜𝐨𝐧𝐜𝐞𝐩𝐭𝐢𝐯𝐨𝐬
El uso de los anticonceptivos hormonales está cada vez más extendido como método de prevención del embarazo. Aunque su uso suele ser seguro, es cierto que disponemos de datos que revelan que las mujeres que toman este tipo de medicamentos presentan un mayor riesgo de sufrir trombosis.
Los anticonceptivos hormonales son un tipo de medicamentos que, basados en la administración externa de hormonas sexuales al organismo, impiden el embarazo. Al recibir estas hormonas, se impide la ovulación en cada ciclo menstrual de la mujer.
Además de esto, también actúan volviendo el moco vaginal más espeso, para que sea muy difícil para los espermatozoides atravesarlo. Su efectividad es bastante alta cuando se emplean según los lineamientos establecidos.
Parece ser que los estrógenos, componente clave de los anticonceptivos hormonales, producen cambios en la coagulación de la sangre. Es por esto que, ante una exposición prolongada y a altos niveles de estas hormonas, el riesgo de tener una coagulación alterada y de que se formen trombos aumenta.
Se ha estimado que el riesgo de padecer una trombosis que se achaca a la toma de anticonceptivos es de 1 por cada 100 000 mujeres que los toman.
Aunque parece un riesgo bajo, debemos tener en cuenta que suelen ser mujeres jóvenes y previamente sanas, y que hay millones de usuarias de anticonceptivos alrededor de todo el mundo. Esto hace que sea un factor más a tener en cuenta a la hora de elegir este tipo de anticonceptivos.
Aún así, no todos los anticonceptivos hormonales presentan la misma composición. Cada vez se diseñan más anticonceptivos que contienen una menor dosis de estrógenos. Se minimiza, así, este y otros riesgos que estas hormonas suponen.
La anticoncepción hormonal sigue siendo segura
Los anticonceptivos hormonales siguen siendo un método muy seguro para la prevención del embarazo. Su uso extendido y los avances en el desarrollo farmacológico hacen que cada vez conlleven menos riesgos. Sin embargo, no están exentos de efectos secundarios.
Por ello, lo más recomendable es que antes de comenzar a tomar o a utilizar cualquier tipo de anticonceptivos, acudamos al especialista. Este será quien valore cada caso los posibles factores de riesgo asociados para decidir si es recomendable su uso. En caso de serlo, aconsejará en qué formato y composición hay mayor seguridad.