Las flores de Bach son un conjunto de 38 esencias florales, descubiertas y desarrolladas por el Dr. Edward Bach, que ayudan a devolver el equilibrio necesario para una buena salud. A diferencia de la medicina tradicional, estos remedios no combaten los síntomas sino que buscan las causas de la enfermedad. El sistema está basado en el concepto de que las enfermedades y malestares son una manifestación de los conflictos entre el alma y el cuerpo, por lo tanto se deben abordar desde lo más profundo de la persona, tomando conciencia y trabajando sobre el campo emocional con una visión integral de la persona. El sistema floral de Bach es simple, puede ser utilizado por todos y sirve como complemento de otras terapias. Es completamente natural y no tiene ningún efecto secundario. Mientras la mayoría de terapias se encargan de aliviar síntomas, las flores de Bach van a la causa emocional de la enfermedad y permiten que la persona actúe sobre ella para alcanzar equilibrio y bienestar. Este tipo de terapia permite entender la enfermedad como una oportunidad de conocerse mejor a uno mismo y superar las propias limitaciones, Funcionan empujando al organismo hacia la autocuración, estimulando sus propias defensas. Entre la problemática que puede ser tratada por las flores se puede mencionar:
-Ansiedad
-Depresión
-Estrés
-Insomnio
-Agotamiento físico o mental
-Emociones reprimidas
-Adicciones
-Fobias
-Infecciones resistentes
-Enfermedades crónicas (fibromialgia, jaquecas, colon irritable, etc...)