03/12/2025
Hoy, en el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, queremos compartir una historia que nos recuerda por qué hacemos lo que hacemos y por qué cada proceso de rehabilitación merece ser mirado con respeto, paciencia y amor.
Hace un año conocimos a Charito que había perdido casi por completo el control de su cabeza. Sentarse, mantenerse estable, participar en sus actividades diarias… todo representaba un reto enorme para ella y para su familia.
Pero también llegó con esperanza.
Y con esa esperanza comenzó un camino de trabajo constante, centrado en actividades funcionales, en recuperar participación, en devolverle autonomía, en construir poco a poco una mejor calidad de vida.
Hoy, después de un año de terapia, vemos su progreso: un tronco más estable, movimientos más seguros, mayor confianza y, sobre todo… una participación más activa en su vida. Ese es el verdadero impacto de la rehabilitación: no solo mejorar funciones, sino devolver oportunidades.
En este día queremos recordar que la discapacidad no define a una persona.
Lo que la define es su historia, su entorno, sus capacidades, y el acompañamiento que recibe.
Y también queremos agradecer a cada paciente y familia que confía en nosotros: ustedes nos inspiran a seguir trabajando con amor, compromiso y ciencia cada día.
En NEUROMNI, creemos profundamente que la rehabilitación transforma vidas.
Y esta historia lo demuestra.