
25/07/2025
La reflexología podal se basa en un principio fascinante: cada zona del pie corresponde a un órgano, glándula o sistema corporal. Aplicando presión con técnicas específicas sobre ciertos puntos, es posible activar respuestas en otras partes del cuerpo, mejorando la circulación, equilibrando el sistema nervioso y estimulando funciones vitales.
Cuando hablamos de salud sexual masculina, los puntos reflejos relacionados con los testículos, la próstata, el pene, la región lumbar y la glándula pituitaria adquieren protagonismo. Estos centros energéticos, al ser activados correctamente, favorecen la producción hormonal, mejoran la irrigación sanguínea ge***al, y ayudan a modular la respuesta sexual, tanto en intensidad como en duración.
Muchos terapeutas coinciden en que uno de los beneficios más llamativos de esta práctica es su efecto equilibrador sobre el deseo sexual. Tanto para hombres con deseo bajo como para aquellos con impulsos excesivos, la reflexología contribuye a armonizar esa energía, guiándola hacia un estado de salud plena, donde el placer no está separado de la conciencia.
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