17/12/2025
Que un plato nos resulte atractivo
no es superficial.
Es fisiológico.
La vista es el primer canal de digestión.
Los colores, la forma y la presentación
activan la anticipación y la respuesta digestiva.
Cuando comemos algo que nos entra por los ojos,
el cuerpo se prepara mejor para recibirlo.
Esto también es alimentación intuitiva:
escuchar qué nos apetece
y cómo nos apetece.
No se trata de hacer platos perfectos ni estéticos para redes,
sino de crear comidas que inviten a sentarse,
masticar y disfrutar con presencia.
La alimentación intuitiva no es abandono,
es conexión.
Y la conexión empieza antes del primer bocado.