
15/09/2024
¿Qué deseas?
¿Paz en tu corazón? ¿Amor en tu vida? ¿Autoestima? ¿Salud para tu cuerpo y mente? ¿Dinero? ¿Buenas relaciones? ¿Trabajo? ¿Amigos? ¿Pareja? ¿Una casa? ¿Un coche?
¿Qué es lo que más deseas?
Para mí, lo más importante es la salud. Hace algunos años, cuando perdí mi salud, me di cuenta de que nada de lo demás tenía valor sin ella. Después de un tiempo en el que me quejaba y pensaba que tenía mala suerte, decidí enfocar mi atención en recuperar mi salud. Comencé a visualizarla cada día y, de repente, comenzaron a aparecer en mi vida herramientas, técnicas y filosofías que me ayudaron a recuperarla al 100%.
Aprendí a gestionar mis emociones y a vivir de una manera muy diferente. Ya no soy la persona gris y desafortunada que solía ser. Mi vida se llenó de color, entendí que la mala suerte no existe, y desarrollé la resiliencia para ver la otra cara de la moneda.
Una vez que recuperé mi salud, me concentré en otras áreas de mi vida, y también llegaron nuevas oportunidades. Sigo enfocado en lo que sé que está en camino.
¿Y tú? ¿Sabes lo que realmente deseas? ¿Conoces qué es lo que más anhelas?
La mayoría de las personas saben muy bien lo que NO quieren: no quieren enfermarse, sufrir, perder, vivir aquí o allá, trabajar en algo que no les gusta… Está claro qué es lo que no deseas. Si te pidiera que hicieras una lista de lo que NO quieres, la completarías en segundos. Sin embargo, si te pidiera una lista de lo que SÍ quieres, podrías quedarte en blanco un buen rato.
Primer paso para ser feliz
Deja de enfocarte en lo que NO quieres y descubre lo que SÍ deseas para poder concentrarte en ello.
Todo lo que necesitas es tomar la decisión de hacerlo.
Tu vida cambia en el instante en que tomas una decisión nueva, congruente y comprometida. Al principio, no es crucial saber cómo vas a lograrlo. Lo importante es decidir que encontrarás el camino y enfocar tu energía en lo que deseas.
Ley de Atracción
La Ley de Atracción sostiene que eres un imán viviente. Inevitablemente, atraes hacia tu vida a las personas y situaciones que están en armonía con tus pensamientos predominantes. Tienes el poder de disciplinarte para enfocar tus pensamientos en lo que te interesa y rechazar los que no te convienen. Esta ley, al igual que la ley de la gravedad, funciona constantemente, aunque no siempre sea visible.
Salud, amigos, familia, trabajo, dinero, problemas y oportunidades: todo lo has atraído a tu vida, consciente o inconscientemente.
Si prestas atención a lo que ha llegado a tu vida, podrías darte cuenta de que en algún momento tú mismo lo decretaste.
-Rosa Pavón - Experta en el Estudio TransGeneracional -