18/11/2024
Los Registros Akáshicos son una memoria universal de la existencia, un espacio multidimensional dónde se archivan todas las experiencias de cada alma, incluyendo los conocimientos de las vidas pasadas, la vida presente y las potencialidades futuras.
Este archivo universal contiene todas las potencialidades que el Alma posee para su evolución en esta vida y su verdadera razón de ser, el sentido de la existencia. Existe para el plano individual, planetario y universal, con diferentes frecuencias vibratorias.
El adjetivo akáshico proviene de Akaśa, un término del antiguo sánscrito de la India, que significa ‘éter’, espacio o energía cósmica que penetra en todo el universo y que es el vehículo que transporta el sonido, la luz y la vida. Ya los redactores de los Vedas sabían de esta energía que abarca todos los otros elementos: la tierra, el agua, el aire y el fuego. Es una matriz cósmica omnipresente, el trasfondo del que surgen todas las formas. Es la realidad fundamental del mundo.
El Akash nos aproxima a la comprensión de la naturaleza real del mundo y de nosotros mismos. Nos revela un mundo interconectado en el cual todo se encuentra inmerso en un entramado, todo se crea a sí mismo, y a través de las conexiones cósmicas se crean todas las cosas. Nos hace conscientes de que realmente somos uno. Nos recuerda el poder creador que llevamos dentro, sus responsabilidades y sus infinitas posibilidades.
A su vez, los registros akáshicos nos pueden acercar a la manifestación de nuestro potencial completo, resolver nuestras dudas, contestar nuestras preguntas. Nos podemos conectar con los Registros Akáshicos a través de nuestro Ser Superior, en un estado de profunda relajación, para intentar revelar las respuestas a las preguntas más profundas de nuestra alma:
• ¿Para qué he venido hasta aquí?
• ¿Cuál es mi aportación única e irrepetible?
• ¿Por qué y para qué me pasa lo que me pasa?…
Dicen que no hay ninguna pregunta que no pueda encontrar respuesta en los Registros Akáshicos, que además de ser la fuente de una inmensa cantidad de información, tiene potencial para sanarnos, para activar nuestra Maestría; para vivir la vida que estamos llamados a vivir.
Este próximo domingo 24, impulsados por el sonido y la vibración de los gongs y otros instrumentos especiales, nos sumergiremos en un viaje directo a la esencia, conectando con el ser superior que habita en nosotros e intentar encontrar las respuestas a las preguntas más profundas.
Fluiremos vibrando al compás del sonido de los gongs, surcando memorias y recordando quién somos en realidad.
24-11-24, 19 h
aportación 25€
Reserva imprescindible, aforo limitado.
