07/06/2025
Lo que es por dentro es por fuera, y la belleza serena de una madre recién partida trasluce un parto consciente, entregado, sereno, potente y bien acompañado.
Aquí, nuestra Magda, , esto nos transmite en su último parto en casa.
Así celebramos desde Doulas Mallorca, los días especiales en los que estamos, el , ayer 6 de junio, y el , con este relato:
"Cuatro veces madre, cuatro veces renacida: Mi Último Parto en Casa."
Y así, en la serena intimidad de nuestro hogar, llegó el final de una era. Mi cuarto y último parto. Cuatro veces he sentido la vida abrirse paso a través de mí, pero este, el último, llevó consigo un aire de despedida y una dulzura inusual.
Recuerdo el calor y la quietud de la mañana, la dilatación ocurriendo en silencio, instintiva, como si mi cuerpo, ya sabio y curtido en este camino, me susurrara. No hubo prisa ni ruido. Solo el latido constante de mi corazón y la respiración suave de mi familia a mi alrededor.
Luego, un expulsivo largo, un desafío amoroso y exigente. Un baile entre la entrega y la fuerza. Mi cuerpo, mis emociones, mis circunstancias..., transitaron entre paciencia y presencia. Cada onda, cada pujo, eran profunda conexión con el poder ancestral de parir.
Conmigo mis hijos, mi pareja, mi tribu. Sus manos, sus voces, sus miradas. Su presencia respetuosa y amorosa fue el bálsamo que me sostuvo, la fuerza invisible que me impulsó. No había extraños, solo amor conocido y profundo. En cada suspiro, sentía su apoyo incondicional, y eso me dió la seguridad que me permitió entregarme por completo hasta el final.
Hoy, miro atrás y veo la culminación de un camino, la sabiduría de mi cuerpo y el inmenso regalo de haber parido desde el respeto, la conexión y el amor en el lugar que llamamos hogar. Mi útero ha cantó su última melodía de nacimiento, y el eco de esa canción resonará por siempre en mi alma.
¡Gracias vida, gracias familia, gracias parto! ¡Fue un viaje increíble! ¡Gracias, , mi niña linda, el fruto de este viaje!
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