
23/08/2025
Pensé que no iba a poder.
Que era demasiado.
Pero lo hice.
La vestí, la abracé, le sostuve el alma y el vestido.
Y mientras ella daba el “sí”, yo en silencio también decía uno: Sí a seguir, sí a sentir, sí a confiar en que la luz vuelve, incluso si tarda.
Estar ahí para alguien, incluso cuando tú estás rota, es de las formas más profundas de amor.
Y de liderazgo también.
Ese amor que te hace salir de ti para sostener a alguien más.
Que te recuerda que lo imposible sí es posible…
Que aún con el corazón en proceso, puedes ser luz para alguien.
Porque eso somos las mujeres que amamos de verdad, con todo:
faro, fuego, raíz.
Ese día vestí a mi mejor amiga de novia. Y me vestí yo también, de verdad.
De esa que no se rinde, aunque tiemble.
De esa que transforma el dolor en amor.
gracias por darme el honor de ser tu dama 🫶🏽 9/8/25 💍
gracias por capturar este inolvidable momento para siempre 🙏🏽