29/07/2021
Hoy, hablaremos de esa crema con un componente muy especial y que tanto recomendamos en consulta, la UREA.
La urea o carbamida es un compuesto químico cristalino e incoloro que proviene del griego donde significa o***a. Se trata de una sustancia que se encuentra de forma natural en nuestro organismo, por ejemplo, es formada principalmente en el hígado como resultado de desecho de la acción metabólica para luego ser eliminada o utilizada como componente natural de la epidermis, formando parte del factor natural de hidratación. Aquí, su presencia se debe no sólo al sudor secretado por las glándulas de la piel, sino también a que es producida in situ durante el proceso de queratinización de las células epidérmicas. Cuando disminuye la cantidad de urea en nuestra piel, tiene lugar una pérdida de la capacidad para retener agua y humidificarla provocando la aparición de rugosidad, tirantez, descamación e irritación de la misma.
La urea es utilizada en multitud de sectores industriales como suplementos alimenticios, fertilizantes, plásticos…. pero cuando esta molécula está presente de forma tópica (cremas, pomadas o ungüentos) en nuestra piel nos aportará grandes beneficios.
Como sabemos, la piel es tu carta de presentación ante el mundo y también es tu primera barrera contra los agentes externos. En general, la cuidamos poco y muchas veces solo actuamos cuando notamos que ya está sufriendo y creemos que con una crema cualquiera o un gel enriquecido puede ser suficiente para repararla o mantenerla en buen estado, pero eso no siempre garantiza una correcta actuación.
Por lo general, las cremas y geles actúan solo en las capas más superficiales de la piel, pero con la aplicación de urea a diferentes concentraciones es posible alcanzar capas más profundas.
¿QUÉ HACE LA UREA EN NUESTRA PIEL?
Básicamente hidratará las capas más profundas de la piel mejorando sus propiedades mecánicas como puede ser la resistencia, flexibilidad y elasticidad. A nivel farmacológico producirá:
• Aumento la retención de agua en el estrato córneo.
• Disminución de la pérdida transepidérmica de agua.
• Mejora la función barrera de la piel (estimulando la síntesis de proteínas estructurales).
• Efecto queratolítico (a concentraciones altas).
• Disminuye la descamación.
• Antipruríginoso.
• Antimicrobiano (actividad inhibitoria de dermatofitos).
• Promueve la penetración de otras sustancias y fármacos en la piel.
• Disminuye la proliferación y diferenciación epidérmica.
En resumen, el efecto de la urea tiene lugar tanto en pieles sanas como en pieles dañada, es utilizada por sus efectos terapéuticos en muchas enfermedades cutáneas como por ejemplo la psoriasis, la ictiosis, el eczema crónico, la piel seca o xerosis, dermatitis atópica, queratodermias palmoplantar, neurodermatitis y dermatofitosis.
Aplicada regularmente sobre piel sana aumenta la hidratación y la suavidad de la zona tratada. Este aumento de la hidratación, a su vez, se acompaña de una reducción de la descamación y de una mejora de la función barrera de la piel con disminución de la susceptibilidad a los agentes irritantes.