
27/05/2025
Cuando nuestro tejido de encía se inflama, su pared defensiva se debilita. Las bacterias se rompen, se deslizan en pequeños vasos sanguíneos, y un paseo por tu sistema circulatorio, directo a tu corazón. Allí, pueden desencadenar o empeorar la acumulación de placa en las arterias, alimentando los mismos coágulos que causan ataques cardíacos y accidentes cerebro
Y no es solo teoría. Los investigadores han detectado ADN de bacterias orales en muestras de placa arterial, sugiriendo que estos microbios literalmente pueden tomar residencia en tus vasos sanguíneos. Mientras tanto, la inflamación sistémica—la respuesta excesiva del cuerpo a la infección—actúa como combustible en un fuego ya ardiente dentro de tus arterias.