
31/07/2025
La autoexigencia es un bicho que se alimenta desde nuestras entrañas (aunque seguramente no se crea desde ahí, claro...).
Se disfraza de responsabilidad, haciéndote creer que es vocación, ambición o afán de superación.
No te engañes, nunca estará satisfecho por mucho que hagas...
Se alimentará de la presión social, se intentará justificar con el "que dirán", con lo que "teníamos que haber logrado a nuestra edad", o "con nuestras expectativas".
Pero, en realidad, lo que busca es menospreciarte, acercarte el síndrome del impostor/a y hacerte sentir que falta producir más, llegar a todo y confundirte con que sólo es cuestión de organizar mejor el tiempo.
No te equivoques, su única devuelta es la frustracion y que olvides lo verdaderamente importante. Perderte.
Y además, te atacará a escondidas, sin que nadie (incluso tú) lo notes, creciendo poco a poco en tu interior y ocupando el máximo espacio posible.
Suena horrible (y lo es) pero, si lo piensas, sólo es miedo sonando (muy alto en tu cabeza).
Por suerte, completamente trabajable. Se desinfla cuando lo identificas y va recuperando su lugar, cuando lo tratas.
Es mayor tortura mantenerlo oculto.