22/06/2025
Con la llegada del buen tiempo, nuestra piel se expone más al sol, al sudor y a factores ambientales como el cloro o la sal del mar. Por eso, preparar la piel adecuadamente antes del verano es clave para mantenerla sana, luminosa y protegida.
✨Limpieza diaria, mañana y noche: en verano, la piel produce más grasa y se acumulan impurezas con más facilidad. Es fundamental limpiarla dos veces al día: por la mañana para eliminar el sebo producido durante la noche, y por la noche para retirar restos de sudor, maquillaje o protector solar. Usa un limpiador suave que respete el equilibrio natural de tu piel.
✨Elige un limpiador adaptado a tu tipo de piel: no todos los productos son iguales. Si tienes la piel grasa, opta por limpiadores en gel o espuma con acción purificante. Si tu piel es seca o sensible, prefiere texturas cremosas o leches limpiadoras que hidraten sin irritar.
✨Exfolia con moderación: la exfoliación elimina las células muertas y ayuda a que los productos penetren mejor, pero no debe hacerse en exceso. Una o dos veces por semana es suficiente. Usa exfoliantes suaves, especialmente si tu piel es sensible o vas a tomar el sol.
✨No olvides el tónico: el tónico refresca, equilibra el pH y prepara la piel para los tratamientos posteriores. En verano, puedes elegir tónicos con ingredientes calmantes como el aloe vera o el agua de rosas, que aportan frescor e hidratación.
✨Limpieza profunda semanal: complementa tu rutina con una limpieza más intensiva una vez a la semana. Puedes usar mascarillas purificantes o hidratantes según las necesidades de tu piel. Este paso ayuda a mantener los poros limpios y mejorar la textura cutánea.
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Cambiamos por fuera, mejoramos por dentro.
