
28/09/2025
Sabemos que esto es un tema complicado, también sabemos que aumentan los casos sobre intoxicaciones, por ello hoy hago referencia a esto.
El aluminio no existe en nuestro metabolismo como metal funcional (a diferencia del hierro, el cobre o el zinc), por lo que cualquier cantidad introducida en el cuerpo actúa como un disruptor.
El aluminio interfiere con:
•Las mitocondrias → favorece la heteroplasmia y acelera el daño en el ADN mitocondrial.
•La conducción eléctrica del sistema nervioso → se acumula en cerebro y tejido nervioso, generando inflamación neurodegenerativa.
•La comunicación luz-agua-DHA → rompe la correcta señalización entre fotones, agua estructurada y membranas ricas en DHA, esenciales para el funcionamiento cerebral.
Por eso se asocia la toxicidad del aluminio con problemas como autismo, Alzheimer, trastornos del neurodesarrollo y enfermedades autoinmunes. Los bebés y niños, tienen la barrera hematoencefálica inmadura, por eso es importante entender esto.
El aluminio es un error evolutivo.
No pierdan la fe y confíen, si se encuentran viviendo un caso de este tipo, hoy les abrazo y les animo a que busquen ayuda porque la buena noticia es que tenemos la respuesta y la solución.