19/11/2025
No necesitas que te pidan perdón para cerrar un ciclo. Esperar esa disculpa te deja la paz en manos ajenas. Cerrar es un acto interno: reconocer lo que pasó, nombrar cómo te impactó y decidir cómo te vas a cuidar a partir de ahora. No es amnesia ni justificar al otro; es recuperar el timón.
Claves que ayudan:
• validar el dolor sin minimizarlo
• diferenciar perdón de reconciliación: puedes perdonar y poner distancia
• observar hechos, no promesas
• poner límites claros para que no se repita
• hacer un ritual de cierre (escribir una carta que no envías, ordenar objetos, despedirte de un lugar)
• practicar la autocompasión: tratarte como tratarías a alguien querido
El perdón del otro puede aliviar, pero tu cierre no depende de que llegue. Depende de tu decisión de cuidar tu historia con respeto y coherencia.