
22/01/2024
Sí, tendemos a pensar que el azúcar blanco es nuestro enemigo número uno, mientras que variantes como el moreno o la panela no nos provocan tan rechazo. Error. Aunque el azúcar moreno se venda como más saludable, son prácticamente iguales. La diferencia recae en que el azúcar moreno tiene unas cantidades muy pequeñas, irrelevantes desde el punto de vista nutricional, de vitaminas, minerales y fibra.
Algo similar ocurre con la panela, que por su aspecto menos refinado y más natural puede engañarnos, pero que en realidad no entraña más beneficios que los anteriores: Si los comparamos, el azúcar blanco tiene un 99% de sacarosa, el moreno un 95% de sacarosa y la panela un 83% de sacarosa con un 6% de glucosa y otro 6% de fructosa. Es decir, por su proceso de elaboración, el moreno (sobre todo el integral) y la panela están menos procesados, por lo que su contenido en vitaminas, minerales y fibra es mayor, aunque estos valores no son para tirar cohetes. Químicamente hablando, podemos considerar que los tres son iguales.
¿Qué ocurre con los edulcorantes?
Con respecto a edulcorantes habituales como la sacarina o la stevia, tenemos mejores noticias, puesto que son una forma de aportar sabor dulce a los alimentos y bebidas, sin necesidad de utilizar azúcar. No obstante, a pesar de que pueden ser una buena alternativa para echar al café o al yogur si no nos gusta tomarlos tal cual, lo mejor es que los utilicemos para ayudarnos en la reducción del contenido en azúcar que consumimos, pero lo ideal sería acostumbrarnos poco a poco a no utilizarlos.