
31/07/2025
Ayer llegó a casa el libro que acaba de publicar mi amigo Francesco
Un libro de historias reales: de trauma, de ansiedad, de expectativas imposibles. De personas que quieren ser vistas y escuchadas. Que quieren cambiar.
Nos conocimos hace años, en el sótano de nuestra residencia en Gießen (Alemania), mientras poníamos lavadoras. Éramos los únicos psicólogos haciendo Erasmus ese año. Desde entonces fuimos inseparables: amigos, cómplices, casi hermanos.
Cada uno hablaba en su idioma, y aun así aprendimos a escucharnos. A escuchar quienes éramos más allá del idioma.
Lo escuché tanto, que cuando quiero comprender italiano leo en voz alta, y en mi cabeza suena su voz. Entonces entiendo este idioma que ahora chapurreo con lo que aquel momento aprendí.
Ojeo el libro y me sorprende descubrir que seguimos hablando el mismo idioma, que es el mismo Francesco que conocí.
El de la psicología, la observación atenta, la escucha. El humor, la música. El cariño tan grande por las dificultades ajenas 🤣 Y las conversaciones que no se olvidan.
Este libro podría ser una de aquellas charlas que teníamos cuando aún éramos psicólogos en formación. Pero ahora son casos reales. Las vidas que acompañamos.
Que no son solo técnica o diagnóstico: es escucha, empatía, estar. Esa esencia que ya teníamos entonces, y que ahora veo escrita en sus páginas.
Hace unos meses nos reencontramos en Madrid, tras 15 años. Ese día España se quedó sin luz.
Y gracias a eso, yo me quedé atrapada en la ciudad… en una terraza maravillosa.
Un día surrealista. Y de los mejores días en mucho tiempo -tu sabes por qué-
Sin luz, sin prisa, sin ruido. Solo nuestra presencia.
Comprobamos que la conexión permanece, más allá del idioma, del tiempo y la distancia.
Gracias por tus palabras dedicadas.
Sí, “el amor es una bomba de relojería”. Lo estudiamos en la universidad. Lo aprendimos de nuestros pacientes. Y de la vida.
Porque puede movernos. Removernos. Incluso salvarnos ❤️
Enhorabuena querido amigo. Por el coraje de escribir desde lo más profundo -significa hablar de quienes somos. Enhorabuena, has conseguido ser de mayor una persona “per-bene”