
03/06/2025
Unas gafas mal centradas o con una graduación incorrecta no solo resultan incómodas, sino que pueden:
Empeorar tu visión.
Causar dolores de cabeza y fatiga ocular.
Provocar mareos o visión borrosa.
Si usas lentes progresivas, el ajuste de la montura es aún más crucial: un desajuste puede impedirte enfocar correctamente a cualquier distancia, afectando el propósito de estas lentes.
¿Cómo evitar estos problemas?
Visita a tu óptico-optometrista regularmente para revisar tus gafas o lentes de contacto.
Evita usar gafas premontadas, ya que no están graduadas ni centradas específicamente para ti.
Asegúrate de que los centros ópticos de tus lentes coincidan con tus ejes visuales.
Una correcta graduación y ajuste de tus gafas mejora tu calidad de vida, protege tu salud ocular y te asegura una visión clara y cómoda.
Recuerda: El óptico-optometrista es tu aliado para una atención visual personalizada.