30/11/2025
Vivimos rodeados de pensamientos y llegan sin avisar, se instalan sin pedir permiso y, a veces, se comportan como malos huéspedes haciendo ruido, ocupando espacio y alterando la paz mental. Sin embargo, solemos tratarlos como si todos fueran importantes, verdaderos o representativos de quiénes somos.
La frase “cada pensamiento es un invitado y no todos deben quedarse a vivir” nos recuerda una verdad esencial en psicología, pensar algo no significa ser ese algo, ni tener que obedecerlo.
Cuando confundes tu identidad con tu pensamiento, ocurre lo que ocurre en muchas consultas, las personas intentan expulsar “a empujones” un pensamiento que no les gusta, y con ello lo fortalecen.
Pero cuando entiendes que tú eres el espacio que observa, no el contenido que aparece, recuperas el control, pues tu valor, tu calma y tu dirección en la vida no dependen de los pensamientos que llegan, sino de lo que decides responder.
Tu mente es un espacio sagrado y los pensamientos son visitantes temporales.
Aprende a recibirlos, escucharlos, agradecer lo que tengan que aportar y despedir sin culpa a los que vienen a perturbar tu paz.
Porque tú no eres tus pensamientos, eres quien decide qué pensamientos merecen quedarse a vivir.
Buen día amigas/os, ya estamos en marcha por nuestros sueños.
En mi centro de psicología y terapias puedo ayudarles: www.ismaeldoradpsicologo.com