
05/09/2025
¿Por qué nos cuesta tanto cambiar? A veces no es falta de voluntad. Es miedo. Incertidumbre. Duda. Y una parte de nosotros que se aferra a lo conocido, aunque ya no nos haga bien.
Cambiar implica soltar una forma de ser, de vivir, de relacionarnos. Y eso puede remover muchas capas: inseguridad, soledad, incomprensión… No es fácil, y no tiene por qué serlo.
Muchas veces, el malestar que aparece al inicio no es una señal de error, sino la prueba de que estás saliendo de lo habitual para crecer más allá de tus límites.
💭 No hay transformación sin miedo. Y sin incomodidad, no hay verdadero cambio.