25/11/2021
¿A quién no le gustaría tener más tiempo para cuidar a sus hijos? A todos. Muchas veces escucho que los padres tenemos que pasar más tiempo con nuestros hijos, que deberíamos recogerles del colegio y pasar toda la tarde con ellos y.... es verdad. Sería maravilloso que en todas las casas papá y mamá estuvieran cuando sus hijos salen de la escuela, que no hubiera trabajos de tarde, de noche o de fin de semana. Sin embargo, la realidad es que muchos papás y mamás tienen que trabajar hasta tarde y no están en casa tanto como les gustaría.
No te sientas culpable. Muchos de los mejores papás y mamás que he conocido doblaban turnos para poder sacar a sus hijos adelante.
Para todos esos papás y mamás que os preocupa no pasar suficiente tiempo con vuestros hijos os dejo 6 recomendaciones que os ayudarán a aprovechar el tiempo de la forma más positiva posible para vosotr@s y vuestros hij@s.
¡No tienes que hacer todas! Cumple con la primera y prueba con dos o tres más cada día!
1. Recíbelos al llegar a casa como si fuera lo mejor de tu día
Los niños son generosos. Están felices de esperarte todo el día si saben que vas a recibirles con toda tu alegría. Toma aire, deja todos los problemas fuera de la puerta, al menos 5 minutos, y dales un abrazo que les haga sentir que para ti son lo más valioso del mundo.
2. Da las gracias a la persona que los cuidó hasta que tu llegaste
Cuidar de un niño es una de las tareas más agotadoras que hay y sobre todo…la más trascendente. La persona que se hizo cargo en solitario durante tu ausencia merece tu agradecimiento. Tus hijos se sentirán valiosos si tratas con valor a la persona que los cuidó y aprenderán a ser agradecidos y no dar por sentado las cosas valiosas de la vida.
3. Túmbate en el suelo y juega
Jugar es una de las tareas que más vínculo crea entre los padres y sus hijos. Pon tu móvil en silencio. Déjate guiar por su juego y regálale 10 minutos de atención plena en la que te vas a meter en su mundo sin que nada os interrumpa. Podéis pintar, jugar con sus muñecos con sus puzles o ¡hacer una pelea! Es tiempo para conectar jugando a lo que el niño o la niña prefiera…
4. Afecto físico
Una de las cosas que más construye el vínculo entre los niños y sus padres son las muestras de afecto físico. Dales besos, abrazos, achuchones y pedorretas. Ocúpate de bañarlos, secarlos y ponerles la ropa. Siéntales sobre tus rodillas para cenar o leer el cuento y pasead el fin de semana cogidos de la mano. El vínculo se construye con besos y caricias.
5. Cuida las formas
Cualquier psicólogo te dirá que el vínculo con sus padres es más importante que las normas (aunque los dos son importantes). Por eso, si llegas tarde a casa es fundamental que cuides mucho la relación con tus hijos. Cultiva momentos de felicidad y evita los gritos, amenazas o castigos. Más que otros padres la educación en positivo; los límites, rutinas, refuerzos y normas te van a ayudar a construir respeto y normas sin deconstruir la relación. Si te cuesta mostrarte tranquilo, ser paciente o gestionar situaciones difíciles como las rabietas o los enfados puedes empezar aquí: https://bit.ly/3CQvn6K
6. Túmbate en su cama
La hora del ir a dormir es un momento especial. Todo está en silencio y es el momento perfecto para escuchar. Acuéstate a su lado y hablad. Estas son algunas cosas de las que podéis conversar:
- Cuéntale cómo fue tu día y pregúntale cómo fue el suyo
- Que te cuente que fue lo mejor de todo el día
- Pregúntale en qué está pensando
- Y con qué cree que va a soñar
- Dile todas las cosas que le hacen especial
- Despídete cuando esté dormido/a
Hacer que tus hijos se sientan queridos y desarrollen un buen vínculo contigo no es tanto cuestión de tiempo sino de hacerles sentir únicos cuando están contigo.
Por Álvaro Bilbao - Neuropsicólogo
www.alvarobilbao.com