13/05/2025
Seguimos destacando a personas excepcionales en Biosabor ya que, para nosotros, “Las empresas son las personas”. Por este motivo, nuestro Top Bio de este mes es para nuestra compañera María Victoria Vega Navarro, envasadora de la línea del asurcado, y la destacamos por su expresión artística en las manualidades, por ejemplo replica a ganchillo cualquier cosa, hasta una planta de tomate.
Victoria nació en Lúcar, un pequeño pueblo de la comarca del Almanzora, donde vivió una infancia tranquila y feliz, rodeada de amigas con las que compartía juegos, risas y tiempo al aire libre.
A los 14 años dejó su pueblo para irse a Almería a estudiar peluquería, iniciando así un camino lleno de esfuerzo y superación. Con solo 18 años, ya había abierto su propia peluquería en Carboneras. Fue precisamente en la academia donde se formó en la que conoció a Pedro, quien con el tiempo se convirtió en su marido, su mejor amigo, su compañero de vida y su mayor referente. Juntos han trabajado codo con codo, apoyándose siempre mutuamente en cada nuevo proyecto.
Hoy, a sus 63 años, Victoria sigue siendo un ejemplo de vitalidad, entusiasmo y pasión por aprender. Madre orgullosa de dos hijos y abuela de una nieta que ya ha heredado su amor por las manualidades y de la cual dice ilusionada que será su sucesora, en lo que a manualidades se refiere. Su historia nos recuerda que nunca es tarde para reinventarse y para compartir lo mejor de uno mismo con los demás.
Desde muy pequeña ha sentido una conexión especial con el mundo de las manualidades. Con solo 8 años ya tejía ganchillo, inspirada por María, la prima de su padre, y alentada por su madre. Su primera creación fue una colcha que aún conserva con orgullo. Desde entonces, ha explorado todas las formas posibles de expresión artística: bordado, pintura en cristal, jardinería, diseño… todo lo que se puede hacer con las manos y el alma. Hoy, además, se plantea la posibilidad de enseñar lo que sabe a través de redes sociales como Instagram o TikTok, para que otras personas, especialmente los más jóvenes, puedan aprender y disfrutar, para ella las manualidades no solo son un pasatiempo, son una terapia, una fuente de calma y realización personal. Nos comenta que cada vez que crea algo nuevo, siente que su mente se abre y que su entorno se llena de armonía y cosas bonitas.
Victoria trabaja como envasadora en la línea del tomate asurcado desde el 2019, sobre Biosabor nos dice que se siente feliz, valorada y respetada por todos sus compañeros. Agradece profundamente a la empresa que, a pesar de que no tenía experiencia o trayectoria previa en el sector agrícola ni había trabajado nunca en almacenes de envasado, se le brindase la oportunidad de formar parte del equipo de Biosabor. Emocionada, nos cuenta que para ella, fue un regalo inesperado a esta altura de su vida profesional poder empezar desde cero, aprender cosas nuevas y sentirse útil, de confianza y acompañada siendo siempre tratada con tanto respeto y cariño.
Victoria es un ejemplo de energía, generosidad y talento creativo que nos inspira dentro y fuera del trabajo, pero también es una persona alegre, abierta, cercana, siempre dispuesta a ayudar a quien lo necesita. Cree profundamente en valores como la empatía, la constancia, la responsabilidad y la bondad. Y lo demuestra no solo con palabras, sino con cada gesto. Su carácter sociable y generoso la ha hecho ganarse el cariño de todos sus compañeros y jefes en nuestra empresa.
Compagina su trabajo con su pasión sin esfuerzo, y con frecuencia sorprende a sus compañeras con collares, pendientes y detalles hechos a mano que reflejan su cariño y creatividad. Siente que en Biosabor ha encontrado una segunda familia, y no duda en devolver ese afecto con su esfuerzo diario y su actitud siempre positiva.
Su mensaje hacia cualquier persona que compagina su trabajo con alguna afición es claro y emotivo: No dudes en hacer lo que te gusta siempre, hazlo con el corazón, sin esperar nada a cambio y sobre todo, no te rindas ya que las cosas cuestan, pero si de verdad te gusta lo que haces todo merece la pena.
Para Biosabor, es un orgullo contar con personas como Victoria, cuya energía y calidez son un ejemplo para todos. Admiramos su capacidad y entusiasmo por aprender y su generosidad a la hora de compartir lo que sabe y lo que hace. Aunque llegó sin experiencia, hoy es parte esencial de nuestro equipazo Biosabor, y nos emociona ver cómo su historia inspira a quienes la rodean. Por todo ello, Victoria es y será siempre una de nuestras TRABAJADORAS EXCEPCIONALES.