02/06/2025
Hace unos días, una persona con la que conversaba en la calle me dijo lo siguiente: "Yo no me privo de nada. Esta barriga me la pago yo, y no es nada barata. Me tomo todas las pastillas que me recetan los médicos. Que trabajen, para eso están. Yo no voy a estar privándome de nada mientras ellos cobran sin hacer lo que deberían: curar."
Y yo reflexionaba internamente, para mis adentros, y hoy lo comparto contigo: Si tú no te cuidas, ¿quién lo va a hacer por ti?
Porque nadie lo hará por ti.
Puedes disfrazarlo de rebeldía, de libertad, de “yo hago lo que quiero”. Puedes decir que no te privas de nada, que los médicos cobren y se encarguen. Pero la verdad es otra: te estás abandonando.
Esa barriga, ese malestar, esa resignación que arrastras… no son libertad. Son el resultado de años sin darte el valor que mereces, de no amarte. De esperar que alguien te cuide, que alguien repare lo que nadie te dio, de que alguien se haga cargo del amor que no te das. Y como no llega, decides dejarte. Como un niño en pataleta, te vas matando lentamente, sin saberlo. Y te haces daño tú solo.
La vida no te debe nada. Nadie va a venir a salvarte.
O te haces cargo tú, o seguirás repitiendo las mismas heridas una y otra vez, tropezando con la misma piedra y culpando al destino, cronificando el dolor bajo un velo de pasotismo prepotente, narcisista e infantil que no va a resolver nada. Y en el fondo, lo sabes.
La cura no está en una pastilla, ni en un médico que ni conoce tu historia ni le importa. Comienza en el momento en que te miras al espejo y decides no dejarte morir lentamente. Cuando empiezas a amarte de verdad, a profundizar en tus heridas para abrazarte y sanarte.
Cuidarse no es de tontos. Todo lo contrario: es de valientes. Porque implica asumir lo que duele, lo que pesa, lo que nadie quiere ver y sanarlo.
Así que ya basta de excusas. Ya no eres una niña ni un niño. Eres un adulto. Y solo necesitas tomar las riendas de tu vida, hacerte responsable de lo que nadie puede hacer por ti. Tú eres quien tiene que salvarse. Y esa decisión comienza ahora.
