14/11/2025
Hay algo en el cuerpo que nunca descansa:
un pulso eléctrico, una vibración secreta que sostiene la vida incluso cuando la mente no escucha.
La ciencia lo ha confirmado mil veces: no somos solo hueso y memoria, somos ritmo, flujo y campo vibratorio que se desajusta cuando la tensión se queda demasiado tiempo.
Cuando la frecuencia interna se desordena,
la energía se pierde,
la voz se opaca,
el movimiento pierde intención,
la respiración se vuelve un rumor cansado.
Aun así, el cuerpo siempre conserva un mapa para regresar.
Un hilo invisible que vuelve a afinar lo que se había desafinado.
Ese ajuste tiene un nombre: COHERENCIA.
Y ese retorno tiene un camino.
Si quieres entender cómo funciona de verdad esta forma de sanación
sin misticismos,
sin promesas vacías
desde la bioelectricidad, el sistema nervioso y la sensibilidad profunda…
Lo he dejado todo explicado en mi blog.
cristinacervantes.net
Allí encontrarás la historia completa:
cómo la frecuencia sostiene la vitalidad
y cómo volver a ella cambia la vida desde dentro.