10/04/2021
‼️¿Qué son las crisis disociativas? ¿Cómo podemos ayudar en esos momentos? Una paciente compartió conmigo este maravilloso relato que me ha permitido publicar donde lo explica magistralmente:
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Where the hell is my mind?
Sufro de Trastorno Límite de la personalidad y Estrés post traumático agudo, entre otras cosas. Esta problemática hace que en momentos de retraumatización o situaciones de mucho estrés o ansiedad, se den en mí crisis disociativas (tanto despersonalización como desrealización) e incluso puedo llegar a tener pequeños brotes psicóticos (con alucinaciones incluídas)
A veces, si aún no me he ido del todo (porque esto no deja de ser un mecanismo de defensa del cerebro ante situaciones muy dolorosas de las que "se fuga") puedes ayudarme a anclarme a la realidad, recordándome que estoy aquí y ahora, que estoy a salvo. Uno de los indicadores que he aprendido a ir reconociendo son mis manos, no dejo de mirarlas y palparlas, porque es donde primero empiezo a dejar de sentirme. Pero cuando ya me he ido no intentes razonar conmigo.
Cuando estoy así, dejo de sentirme real, como si mi cuerpo no me perteneciese; no sé dónde estoy ni puedo reconocerte aunque seas la persona que estaba a mi lado hace apenas 5 minutos. El pánico que siento es terrible.
Me agarroto, lloro, chillo que no te acerques, temo que me hagas daño.. Siento puro terror.
Ponte en mi lugar: cómo te sentirías tú si de pronto no pudieses reconocerte ni sentirte a ti misma? Qué sensaciones tendrías si súbitamente dejases de saber dónde estás y quiénes son las personas que te rodean y te miran como si te conociesen de algo?
Asusta, verdad?
Hay ocasiones en las que me veo a mí misma desde arriba y no puedo hacer absolutamente nada, otras siento que todo es una especie de película o teatro extraño en el que todas saben lo que pasa menos yo... Como si me separa del mundo una especie de neblina o papel celofán que nadie parece advertir.
Si la cosa se vuelve muy aguda y aparecen las alucinaciones, tan sólo grito cosas dependiendo de lo que esté viendo o reviviendo en ese momento (me gustaría ser capaz de concretar más pero cuando el episodio termina, no recuerdo absolutamente nada, esto que estoy narrando es lo que me han contado a mí las personas que lo han presenciado)
Habitualmente todo está relacionado con que van a hacerme daño, van a llevarme a un lugar oscuro con él y todas las demás personas se olvidarán de mí... Así que los gritos podrían traducirse como: seré buena, lo juro, no me toques, por favor... seré buena, no vuelvas a hacerlo, no me hagas más daño, no se lo diré a nadie... No, no vuelvas a llevarme ahí, están viniendo, tengo mucho miedo, por favor...; todo esto acompañado de una fuerte tensión muscular, golpes en mi cabeza como si tratase de sacarlo de ahí, aspavientos, llanto incontrolable... Y no permito que ninguna persona se acerque a mí, me da pavor y grito más fuerte y me alejo contracturando mi cuerpo en posturas de todo menos ergonómicas.
También hay momentos de una extraña calma, en los que da la sensación de que todo ha pasado, me quedo muy quieta, respondiendo con monosílabos o silente, mirando a un punto que sólo yo puedo ver pero que es más real para mí que tú mismo.
No, la crisis no ha pasado, no intentes acercarte porque volveré a gritar del más puro terror.
Si algo he aprendido es que si quieres ayudarme lo mejor que puedes hacer por mí es ser paciente, no invasivo, y que no sirve de nada que trates de entablar un diálogo racional conmigo ni recordarme que es una crisis y que pasará, porque no puedo procesarlo.
Quizás también tengas que contenerme, porque para sentirme real, puedo llegar a hacerme daño físico (autolesiones) y en ese estado son aún más peligrosas.
Para mí, la mejor forma de conseguir que me tome la medicación de rescate (que rechazo porque un extraño me está intentando meter en la boca algo que no entiendo) es entrando en mi propia alucinación, convenciéndome, por ejemplo, de que eso me hará invisible para los que vienen a buscarme y no podrán hacerme daño, con una voz suave, dulce, serena, que desprenda seguridad y confianza.
También puedes hacerlo a las malas, sujetándome y haciéndomelo tragar, pero me han dicho que tengo muchísima más fuerza de la habitual en esas situaciones y no es una forma muy humana de tratar a nadie que está sufriendo.
Porque lo que mi cerebro necesita en ese momento es dormir para poder "resetearse" y volver a la normalidad.
No soy agresiva ni peligrosa, no soy una etiqueta y esto lo estoy contando porque veo cada vez más el desconocimiento que se tiene sobre cómo actuar ante crisis de salud mental: taserazos, porrazos, contenciones mecánicas...
Y no, no es a golpes, nunca, por muy desagradable y perturbador que te resulte verlo, esa persona está sufriendo muchísimo y desearía poder parar eso con todas sus fuerzas.
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