
08/02/2024
En el post de hoy de Coaching Anímico voy a intentar inspirarte cuál es el aprendizaje que debes llevar a cabo de forma consciente si desarrollas tu experiencia de vida desde la personalidad egotista del eneatipo 2.
Vamos entonces con el tema tan interesante de hoy: El Eneagrama de la personalidad y uno de sus eneatipos, el eneatipo 2 o aquel carácter que utiliza la máscara y las vestimentas del “ayudador”.
Para empezar, ¿qué es y para qué sirve el Eneagrama de la personalidad?. El eneagrama es un manual de instrucciones de la condición humana mediante el que podemos comprender las motivaciones profundas que hay detrás de nuestras conductas, comportamientos y actitudes. El eneagrama es un mapa anímico - conductual- que habla de nueve esqueletos psicológicos, egos, caracteres o personalidades, y que a todos nos cuesta muchísimo reconocer.
Realmente, se trata de falsas personalidades, a través de las cuales nosotros percibimos el mundo. En el eneagrama se les llama eneatipos. Estas falsas personalidades son las gafas por las que filtramos la posible realidad, hasta que, poco a poco, vamos evolucionando y pasamos a percibir desde la conciencia pura. Esa percepción más pura es lo que se llama el Ser, aunque igualmente existe un ligero filtro egotista, ya que siempre sigue siendo simple percepción y no “saber” absoluto. Siguiendo con el símil de antes, cuando entramos en contacto con nuestro verdadero Ser, las gafas por las que percibimos la realidad apenas llevan dioptrías.
Entonces, podríamos afirmar que el eneagrama es el mapa de tu inmenso universo interior no evolucionado, a través del cual tu alma se mueve para encontrarse así misma, gracias a los distintos movimientos que realiza para reconocerse, más allá del ego, tras el que ella misma eligió estar oculta para ti. Y con estas señales para reconocerse te estará ayudando a evolucionar y crecer como ser humano.
Una vez nos hemos introducido en el mundo del Eneagrama vamos a ver, a grandes rasgos, las características del eneatipo 2. Los eneatipos 2, en gran medida, son generosos, halagadores, intrusivos, cariñosos, les cuesta mucho pedir, a cambio son serviciales y detallistas, aunque, Inconscientemente, siempre quieren que se les agradezca y reconozca su ayuda y participación.
Su miedo, y lo que les enfada bastante, es el miedo a no ser necesitado por los demás y a no dar nunca lo suficiente. Además tiene auténtico pavor a ser rechazado.
Por todo ello, este eneatipo es el más controlador, aunque como siempre al ego le cuesta mucho reconocer sus propios defectillos, ja,ja ja.
Desperdicia su energía en empatizar de forma exagerada con los demás. Su mecanismo de defensa o estrategia que sigue para protegerse ante el mundo y así reducir al máximo las consecuencias en una situación muy intensa emocionalmente, es darle al otro lo que él mismo necesita, sin darse cuenta de que proyecta sus necesidades en los demás. Anula por completo su propio Amor en beneficio de los demás. En el caso de que no le presten atención, hará lo imposible para que lo cuiden y lo quieran. En definitiva, la falta de autoestima de este tipo de carácter viene definida por depender continuamente de la aceptación de los demás, y por ello busca constantemente complacer y agradar al prójimo. Repito, su mecanismo de defensa es la represión, rechazando de forma inconsciente sus necesidades y carencias para mantener una imagen de persona, generosa y servicial. Este eneatipo de pequeño percibió en su entorno que no era correcto amarse a sí misma y a sí mismo, percibió la autoestima como si se tratara de egoísmo o narcisismo. Esta es su herida principal de la infancia y, por tanto, no se siente digno de Amor. Se dice a sí mismo: “Si ayudo y soy servicial me amarán ”.
La justificación o el autoengaño para tapar sus sombras es: “Si busco ayudar a los demás podré justificarme por evitar mirar mis necesidades y carencias propias”. A Los 2 con ala 1 predominante se les llama “el servidor” porque son muy dados a servir a los demás de una forma altruista. Son muy implacables y exigentes. Otra característica es que son bastante clásicos a la hora de vestir. Y a los 2 con ala 3 predominante se les llama “el anfitrión”, porque son más sociables, más extrovertidos, más seguros de sí mismos.
Al eneatipo 2 le sale fácil el conectar con los demás, y su desafío de crecimiento es aprender a poner límites conectando primero consigo mismo, sentir las emociones para poder saber quién realmente es. Cuando un eneatipo 2 se ha dado cuenta de que necesita un crecimiento personal, el valor que convierte en virtud es la humildad.
Bueno, ahora vamos con lo más interesante: ¿Qué debo intentar mejorar si me siento identificado y encasillado con alguno de estos comportamientos automáticos? Es decir, vamos con la sanación del eneatipo 2 o aprendizaje consciente que debe realizar; sí, de forma consciente, porque se trata de intentar evitar actuar desde el modo piloto automático:
1- Toma conciencia de la existencia de tu cuerpo; no dejes nunca de escuchar lo que quiere. Descansa, disfruta. 2- Recuerda que no te aman por todo lo que les ayudas, sino por ser realmente quién eres. 3- Ser solidaria, generosa, entregado, etcétera, está bien, pero “lo mejor de lo extraordinario” es ser tú misma y tú mismo y amarte de forma incondicional. 4- Siente y vive lo tuyo con gran intensidad, pues ya has pasado mucho tiempo sin existir y sin vivir tu propia vida. Descubre tus hobbys y mejor si te atreves a realizarlos solo. 5- Recuerda que para dar a los demás de forma correcta, desde el punto de vista energético, primero tienes que darte a ti misma, es decir, debes primero profundizar en tu autoconocimiento y amarte. Reflexiona sobre tus emociones y aprende a estar sola. 6. Incluye la palabra “no” en tu vocabulario. Aprende a poner límites con los demás. 7- Recuerda que en las relaciones no solo hay un “tú”, sino también un “yo”. 8- Examina si realmente las personas necesitan tantas cosas como tú piensas y no vivas tan pendiente del otro, pues puedes perder tu verdadera identidad. 9- Comprométete en pasar a la acción y solucionar los obstáculos que aparecen en tu vida. 10- Date cuenta de que no necesitas encontrar a tu media naranja. Tú ya eres una naranja acabada, perfecta , única y abundante. 11- Permítete vivir, permítete sentir tus emociones. Atrévete a vivir en el “ahora”. ¡Ámate a ti misma con locura!. 12- Y última: Ten fe ciega en ti misma y en ti mismo. Cree en ti y en tu propia valía. Tú quieres y puedes manifestar una vida “lo mejor de lo extraordinario”. Y todo ello gracias a que eres por naturaleza un ser humano acabado, perfecto, único y abundante.
Bueno, espero haberte inspirado con este post para que te ayude a darte cuenta de que, si eres un eneatipo 2, no te aman por todo lo que les ayudas, sino por ser quién realmente eres.
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