06/04/2019
Esta es la carta recibida de un socia de COFENAT.
Por su interés la reproducimos tal y cómo nos la ha enviado. Gracias Ana Isabel
Indignada, alegre y triste con el Gobierno, aunque parezca una incoherencia, es cierto. Os explico los motivos:
Estoy indignada porque el Gobierno ha dictaminado lo que es bueno y malo para nosotros. Ha hecho un anuncio en contra de las pseudoterapias (Terapias Naturales), con nuestros impuestos (porque los malvados que trabajamos en las pseudoterapias, pagamos impuestos), y ha destinado el dinero de esos impuestos en financiar anuncios en contra de los profesionales de este sector.
Triste, porque se cree que la población que acude a nuestros centros no tienen capacidad para discernir lo que le conviene y no le conviene (como si fueran unos niños que su papá les dice lo que tienen que hacer). Y porque el Gobierno le está bailando el agua a esa gente que está obteniendo muchos beneficios de estar en contra de las Terapias Naturales y se está olvidando del ciudadano que les vota.
Y alegre, porque considero que los ciudadanos que acuden a nosotros, nadie les obliga a venir, (no hacemos rituales para que entren en nuestros locales) y hasta suelen regresar (por algo será).
Creo que toda esta campaña en contra de las Terapias Naturales es porque se están dando cuenta que el ciudadano cada vez acude más a recibir nuestros servicios. Y tiene más criterio propio, es decir, que no se le puede manipular con anuncios absurdos.
Y aunque lo intenten no lo van a conseguir. Están perdiendo poder.
Está claro que las Terapias Naturales no son de hace dos días. De hecho, llevan en el mundo miles de años.
Además, los terapeutas estamos preparándonos continuamente y trabajamos duro por formarnos.
Como en todos los sectores, hay mucha gente honrada y que sólo se preocupa por sus clientes, pero también hay algún estafador (también hay políticos que lo son.) Y, es evidente, que a ese hay que perseguirlo, pero no nos metan a todos en el mismo s**o, porque no es justo.
Estamos en un estado de indefensión, en el que todo el mundo está libre para atacarnos. Porque el Gobierno de España no quieren regularnos y, sin embargo, en Europa ya estamos regulados.
No quiero que nadie se sienta ofendido con mis palabras. Simplemente quiero expresar mi opinión. Sólo pido nos respeten y que nos dejen trabajar, porque hay mucha gente con familia que se dedica a esto por vocación y devoción. Nadie que se dedique a esto se hace millonario os lo prometo.
¡REGULACIÓN DE LAS TERAPIAS NATURALES YA!