17/11/2025
Muchas veces vivimos con la sensación de que tenemos que tener todas las respuestas ya, que todo debe estar bajo control y que equivocarnos es un lujo que no nos podemos permitir. Esa autoexigencia nos roba calma, nos llena de ansiedad y nos desconecta de lo que de verdad importa.
Respira. No necesitas resolverlo todo hoy. No hace falta que el camino sea perfecto para que valga la pena. Confiar en el proceso también es un acto de valentía y de autocuidado.
La vida no es una lista de tareas por cumplir, es un viaje en el que aprender a detenernos y recordarnos que somos humanos es parte esencial del trayecto.