
29/08/2025
QUEJA PÚBLICA:
Ya está llegando a nuestras casas la tan esperada "revista de Fiestas Patronales Virgen de los Remedios" y con ella nos recuerda que se vienen los días grandes de PUEBLA DE LA REINA(EL PARAÍSO) . Es de agradecer a nuestro Excmo. Ayuntamiento Puebla de la Reina y a las personas y patrocinadores que sigan, cada año, haciendo ésta publicación.
Pero el motivo de éste post es para denunciar y hacer público y repetido, continuado e inexplicable trato despectivo, despótico, enfermizo, iracundo, chulesco y amamazante con el que el empleado municipal designado y perpetuado a dedo, Don José Manuel Valedeón Ginés trata a mi negocio, a mi familia y a mí persona. Hay que recordarle que el puesto de trabajo que le regalaron, se paga con los impuestos de todos los ciudadanos y es de atención pública y no está contemplado en sus funciones y atribuciones el despreciar una y otra vez a las personas o entidades, ni el decidir quién sí o quién no, puede ejercer sus derechos.
Hace unos minutos, dicho funcionario entró en mí local Gastro Pub Akua & Bar Agustín, a traer la revista de ferias. Tras dejar un ejemplar, le digo educadamente: "José, muchas gracias, pero tienes que dejar otra, por favor. Una para el bar y otra para mi casa". Su respuesta, es salir por la puerta balbuceando y repitiendo que: "¿y eso por qué? ¿Por qué los dices tú? No tengo ganas de discutir contigo". Acto seguido, me deja con la palabra en la boca y sale corriendo de mi local, cuan demoníaco con el fuego del averno. Dos testigos han presenciado toda la secuencia y sí alguien duda, están las cámaras de mi negocio que han registrado todo.
Señor Valdeón, ¿qué ha cambiado tanto de hace apenas dos lunes, cuándo con amabilidad y dulzura vino a pedirme 10€., para el torneo de pádel? O ¿cuándo ha venido para pedir dinero para anunciarse en ls revista?
La situación de hoy, podría haber sido una anécdota o pensar que el individuo en cuestión tuviera un mal día. Pero no es así porque dicha actitud la muestra hacia mi negocio, mi familia y hacia todo lo referente a mí con total diligencia, en la mayoría de ocasiones. A parte de la educación del ínclito señor Valdeón mostrada en repetidas y continuadas veces, cuándo llegamos al consistorio y saludamos o bien nos niega el saludo o sale hacia la calle, cabeza gacha para evitar cualquier palabra. Sí le preguntas cualquier duda como ciudadano, referente a su puesto de trabajo, se niega a responderla. Y lo más triste, que no soy al único que dispensa dicho trato.
Señor Valdeón usted ejerce un puesto de trabajo de servicio público y cómo mínimo, nos merecemos un trato digno y normalizado. No tenemos culpa de sus fobias y furias y sino está contento, pues acabe de profundizar y actualizar sus estudios de matemáticas.
Sí hago esto público es porque estamos cansados de sus desprecios e ira con la que nos tratas y sin motivos algunos. Que veas a mis padres y los desprecies como si fueran un pañuelo de papel. Que le hablemos y salga siempre amanazante y desafiante. O quizás sea porqué tiene miedo a que pueda desvelar aspectos turbios de su pasado. Esté tranquilo, no soy así. Y para su información, sí le pido dos programas de feria es porque tengo derecho a recibirlos. Y no dos, sino 3; pues son 3 los domicilios que tengo y por los que pago impuestos. O ¿es usted quién decide en qué vivienda se deja programa o en cual no? Delante mía no ha puesto objeción a entregar una revista a una persona que caminaba por la calle. ¿Por qué a mí sí me pone reparos?
Los tikets del ayuntamiento del programa del comercio local, las reclamaciones, preguntas, saludos, las publicaciones en las redes municipales referentes a mis sobrinos menores de edad y escritas por usted, los actos de presentación de los dos últimos libros de Placido Ramírez Carrillo , su actitud de prepotencia y desprecios... ¡Ya está bien! Mi familia y yo somos ciudadanos dignos e iguales al resto de las personas que habitan en Puebla. No hace falta ser perro de presa, porque su jefa, ejerza el desprecio y bullying hacia nosotros.
Felices fiestas para todos (para ti también Señor Valdeón) y ojalá no vuelva nadie a tener que sufrir dicho trato por saludar, preguntar o pedir una simple revista de fiestas.