27/03/2025
Yoga y meditar son sinónimos de calma mental.
Meditar tiene que ver con higiene mental.
El primer paso para meditar es cultivar una postura estable y cómoda que permita que el cuerpo se relaje.
El segundo paso es reducir (gracias a la técnica) el volumen de pensamientos y el ruido mental.
El tercer paso es la paz interior.
Sin paz interior ni relax en el cuerpo, la meditación se queda en la superficie.
Con las técnicas adecuadas, se crea espacio entre los pensamientos.
Pasamos del ruido mental y una “mente mono”, que va de un pensamiento a otro, a una mente minimalista, ordenada y sencilla.
Claridad mental. Lucidez. Sencillez.
En la meditación no hay lucha, hay aceptación.
No luchamos contra la mente ni tratamos de anular los pensamientos.
La estructura cuerpo-mente no es un obstáculo ni tampoco nuestro enemigo.
Son mas bien, una herramienta y un vehículo.
Cuando el estado meditativo es mantenido, se trascienden el pensamiento dualista y egocentrico.
El cuerpo está, pero no está.
La mente está latente, en un segundo plano.
Los pensamientos se reducen, y son como nubes que pasan por el cielo.
Dejamos de identificarnos con ellos.
Dejan de ser el foco de nuestra atención.
El foco de la atención pasa a ser la consciencia, el observador.
En realidad, siempre está ahí, solo que las nubes no nos dejan ver el cielo.
Entonces encuentras la paz.
Te sumerges en ella.
Las nubes son los pensamientos.
Cada vez hay menos nubes y si las hay, simplemente pasan y de diluyen.
Entonces el observador es observado.
Experimentas la unidad.
La consciencia individual se funde con la consciencia universal.
Todos somos gotas de un mismo océano.
Todos somos iguales en esencia.
Eso es meditar. Usando mis propias palabras.
No es un proceso intelectual, por tanto es difícil ponerlo en palabras.
Ojalá las palabras y las ilustraciones, te ayuden a entender el proceso.
Ilustraciones de Claire Masar 🙏