
26/08/2025
El otro día volví a ver la primera peli de Venom, y mientras la veía, me vino a la cabeza el pensamiento de “esto se parece mucho a cómo funciona un TCA”.
Obviamente no son lo mismo, pero hay similitudes que me hicieron conectar y ver al TCA representado en Venom. -Ya, Venom no es agradable de ver, pero si el TCA tuviera imagen propia, tampoco sería precisamente bonito a ojos de nadie-. ¿En qué lo vi? Pues en esa forma de meterse dentro de ti, de hablar con tu voz, de confundirte hasta que crees que eres tú… cuando en realidad no lo eres.
Y pensé que tal vez por eso me salió esta comparación, porque muchas veces explicar cómo se vive un TCA desde dentro es muy complicado. Por ello, ponerle cara, cuerpo, imagen… puede ayudar a verlo, identificarlo y desfusionarte de él, porque cuando un TCA está presente, se siente justo así:
👉 se fusiona contigo
👉 se alimenta de tu vulnerabilidad
👉 te promete poder pero al final te aísla
👉 y se esconde, aunque sigue ahí.
Lo que más me toca de esta metáfora es esa sensación de no saber dónde acabas tú y dónde empieza él. Esa fusión tan fuerte que te confunde y te hace dudar de qué pensamientos y decisiones son tuyos y cuáles vienen del TCA. Y eso… es agotador, lo sé.
Quizá por eso lo he querido compartir aquí. Porque siento que a muchas de las personas a las que acompaño les ayuda ponerle una imagen al trastorno. Sacarlo “fuera”, verlo como algo externo y no como parte de su identidad. Porque como siempre digo: “Tú no eres tu TCA, no eres esa voz, ni eres esa sombra”.
A mí misma me sirvió y me sirve pensarlo así con la hipocondría, como trastorno mental que es, el hecho de personificarla y darle una forma me ayudó para poder diferenciarme de ella. Y pensé que quizás, a ti también te ayude verlo así 💜.
¿Qué te ha parecido esta metáfora?
¿Conocías a Venom?
Cuéntame cómo es para ti o te imaginas al TCA.
Os abrazo, fuertísimo 🤍🫂