20/11/2019
IDEAS, TENDENCIAS Y COLORES PARA PINTAR EL DORMITORIO
Tonos vivos y alegres, colores neutros, delicados pasteles o combinaciones modernas y atrevidas que crean divertidos contrastes… sea cual sea tu forma de ser, hay una manera de pintar el dormitorio perfecta para ti. ¿Lo vemos? 🙂
El dormitorio es la estancia donde buscamos sentirnos más a gusto, el lugar que ofrece más intimidad que en ningún otro en la casa. Y la pintura, así como la decoración o la distribución, tiene mucho que decir a la hora de crear ambientes confortables que inviten al relax, la tranquilidad y el descanso.
En cualquier habitación, la pintura de las paredes es un elemento decorativo capaz de marcar estilo propio (ya vimos cómo podía influir la elección del color para pintar en salón). En el caso del dormitorio, cobra especial importancia teniendo en cuenta que, con toda seguridad, va a ser lo último que veas antes de dormirte y la primera impresión visual que capten tus ojos al despertar.
Los tonos y colores, así como su distribución y composición, van a influir a la hora de poder crear ese ambiente armonioso que haga de tu dormitorio ese lugar donde más cómodo te puedes sentir y el que mejor refleja tu propia personalidad.
Las mejores opciones para pintar un dormitorio
Como idea general, las paredes de un cuarto pensado para el descanso piden tonos suaves, aunque tienes opciones muy distintas que también admiten colores vivos y alegres que, bien combinados, pueden lograr el equilibrio estético que necesita un dormitorio.
Además de tus gustos y de tu manera de ser, a la hora de elegir los colores de las habitaciones tienes que tener en cuenta dos detalles importantes: el tamaño y espacio disponible y, también, la luz natural que entra cada mañana en el cuarto.
Para habitaciones pequeñas y estancias interiores con poca luz, el blanco siempre es una elección acertada. Te dará sensación de mayor amplitud y luminosidad y quedará bien con cualquier tipo de mobiliario que elijas. Además, dará protagonismo a detalles decorativos fundamentales en un dormitorio como son los textiles: colchas, fundas nórdicas, cojines… destacarán más con las paredes en blanco.
En estancias más grandes, el color blanco puede servirte, también, como base perfecta para combinar con otras tonalidades, permitiéndote crear espacios muy personales. Por ejemplo, para un cuarto de aires marineros, jugar con blancos y azules es una buena elección y haciendo tu composición en blanco y tonalidades verdes, tendrás un espacio fresco, acogedor y con un bonito toque natural.
Si prefieres los colores oscuros, también son una opción posible, siempre que tengas un dormitorio amplio y los combines de manera que no crees un efecto “lúgubre”. Un verde oliva oscuro en la zona del cabecero, en contraste con tonos más suaves, como el tan de moda mint, en el resto de paredes, puede resultar muy elegante y acogedor, al igual que una combinación similar, pero jugando con un azul oscuro efecto aterciopelado y tonalidades menos densas y profundas.
Tonos neutros, una elección segura
Si no quieres complicarte demasiado, hay colores para el dormitorio que son siempre acertados. Existen algunos colores y tonos ‘comodín’ que quedan genial en cualquier dormitorio.
Los grises suaves son una de las gamas más elegantes por las que puedes apostar. El gris es pura tendencia esta temporada y ha llegado también a las habitaciones. En acabados perla, junto al blanco, da un resultado fantástico y si quieres, también puedes crear combinaciones con tonos más oscuros junto a otros más claros, una idea perfecta para un dormitorio moderno y de aires minimalistas.
Decoración de espacios pequeños:
Los beiges, arena y n**e resultan de lo más relajantes. Son colores que, además, combinan perfectamente con el estilo que prefieras. Los marrones suaves van fenomenal, por ejemplo, para un dormitorio con suelo en madera y, en cambio, un n**e con matices rosas o malvas, es perfecto para dar un toque acogedor a una habitación de suelo cerámico.
Otra posibilidad acertada son los tonos pastel: azul celeste, rosas, amarillos o violetas suaves… crean ambientes cálidos, ideales para el descanso, y además, ponen un punto romántico ideal para un dormitorio de estilo rústico o para una habitación no demasiado grande pero sí muy luminosa.
Algunas ideas originales en las que inspirarte
Como ves, existen muchas posibilidades a la hora de dar color a los dormitorios de tu vivienda. Planifica la pintura de los cuartos intentando imaginar el resultado final. En tu mente, atrévete a probar algunas combinaciones novedosas.
Una de las tendencias decorativas más actuales a la hora de pintar las paredes del dormitorio, consiste en diferenciar claramente el paño donde se sitúa el cabecero. Queda muy bonito situar en esta parte de la habitación un tono más fuerte, que destaque del resto de paredes. Por ejemplo, puedes probar a pintar las paredes en acogedores y suaves tonos arena y, en contraste, la pared del cabecero en un potente terracota. Puedes incluso pintar en liso todo el cuarto y optar por papel pintado decorativo justo en la zona de la cama, para tener, asi, un efecto mural, de total actualidad.
Otra de las opciones más novedosas es incluir tonos vivos en puntos determinados para dar a un dormitorio personalidad propia. Imagina un cuarto de invitados o una habitación infantil pintada en amarillos pálidos, pero incluyendo en una columna o como marco de un armario empotrado, un estupendo tono mostaza o naranja… ¿a que queda genial?
Como última sugerencia, tienes también pinturas efecto “inacabado” que resultan muy originales y son ideales para una habitación en la que quieras un estilo práctico, moderno y “urbano”.
Estas son solo algunas ideas para que la pintura te ayude a lograr que tu dormitorio sea ese espacio acogedor del que te cuesta salir.
