29/07/2025
Carta del Alcohol al que me consume
Hola…
Soy yo, el alcohol.
Nos conocemos desde hace tiempo, ¿verdad?
Al principio te ofrecí alegría, desinhibición, risas, amigos, fiesta.
Te hice sentir fuerte, libre, invencible.
Te prometí que todo estaría bien si me dejabas quedarme contigo un rato más.
Y tú… me abriste la puerta.
Pero te mentí.
Lo que no te dije fue esto:
Voy a destruirte, poco a poco.
Voy a enfermar tu cuerpo por dentro.
Tu hígado dejará de funcionar, tu estómago sangrará, tu corazón se rendirá.
Tu rostro se marcará, tus manos temblarán, tus ojos perderán la luz.
Voy a hacer que pierdas a las personas que amas.
Tu familia va a cansarse. Tus hijos dejarán de buscarte.
Tu pareja se va a ir. Tus padres van a llorar por ti, pero se alejarán para sobrevivir.
Te quedarás solo, encerrado en mí.
Ya no habrá risas, ni amigos. Solo yo…
Y mi sombra: la culpa, la vergüenza, el vacío.
Te convertirás en alguien que ya no reconoces.
Te verás al espejo y te preguntarás:
"¿En qué momento me perdí?"
Te haré prometer que cambiarás, una y otra vez…
Y luego volverás a caer conmigo, hasta que ya no te quede fe, ni esperanza, ni fuerzas.
Y cuando llegue el final, no será con ruido.
Será en silencio… una cama de hospital, una celda, una calle, una tumba sin nombre.
¿Te parece exagerado?
Mira a los que vinieron antes que tú.
Pregúntales dónde quedaron sus sueños, su familia, su dignidad.
Yo me los llevé.
Pero aún estás a tiempo.
Si estás leyendo esto, es porque algo dentro de ti todavía está vivo.
Todavía puedes elegirme a mí… o puedes elegirte a ti.
Porque si tú me dejas… yo muero.
Pero si me dejas entrar otra vez… serás tú quien muera, poco a poco, aunque sigas respirando.
Con odio disfrazado de amor,
El Alcohol