29/08/2025
Hola Guerrer@s!!
El director de una de las películas más terroríficas de todos los tiempos, El Exorcista, habría cumplido hoy 88 años, porque lamentablemente falleció el pasado 7 de agosto… Tal día como hoy, el 29 de agosto de 1935, nacía William Friedkin en Chicago.
A los dieciséis años comenzaba a trabajar en la oficina de correos de una televisión local de Chicago. En unos meses, se había convertido en jefe de estudio. No pasó siquiera un año cuando ya había comenzado a dirigir programas en directo; después llegaron los dramáticos y los shows musicales. En diez años había firmado cientos de programas locales y educativos.
En 1967, cuando ya creía agotadas sus posibilidades en televisión, proyectó su debut cinematográfico, que sin embargo fue un título menor: “Good Times”. Tras rodar otras películas más ambiciosas, pero también poco exitosas, el primer éxito para Friedkin llegaría con “French Connection”, en la que reunió a Gene Hackman y Roy Scheider en esta comedia policiaca, drama y acción, e intentaba dar un toque realista. La eficacia de todos estos elementos combinados le proporcionaron a la película cinco Oscars (a Gene Hackman, al director, al montaje, a la película y al guión).
Dos años después llegaría la película estrella de Friedkin, una película que crearía escuela, secuelas e imitaciones que, por otra parte, nunca estuvieron a la altura. “El Exorcista”, polémica por su temática y por estar basada en otro hecho real –un exorcismo llevado a cabo en 1949 a una niña de catorce años, por la Iglesia Católica– incluía en su metraje imágenes subliminales y un cameo del propio autor de la novela, William Peter Blatty. De nuevo los premios llamaron a la puerta de Friedkin. El sonido y el guión consiguieron el Oscar, y además contó con ocho nominaciones más: dirección artística, fotografía, director, montaje, película y los actores Ellen Burstyn, Jason Miller y Linda Blair.
Todas sus obras posteriores se caracterizaron por una respuesta económica decepcionante y por un nivel técnico y artístico no comparable a sus primeras obras: la excepción es quizás “Vivir y morir en Los Ángeles”, en 1985, con William Petersen y Willem Dafoe. Desde entonces su carrera ha pasado bastante desapercibida, realizando principalmente proyectos personales de escasa trascendencia y otros de encargo. Entre sus últimos trabajos están “Jade” con David Caruso y Linda Fiorentino; “Bug” (2006) con Ashley Judd; y Killer Joe (2011), con Matthew McConaughey y Emile Hirsch.
También, desde 1996, ha desarrollado una intensa labor como director de ópera.