
07/09/2025
Una vez llevado a cabo este trabajo de fundamentación ‒o más bien dejado planteado‒, corresponde examinar las tareas ligadas a 3) la REFLEXIÓN, con las que la filosofía debe intentar acotar o categorizar la realidad y, como algo en ella, también el mundo. Esas operaciones de categorización (“segmentación” de aspectos o relaciones de objetos) proporcionan el marco teórico ‒habitualmente implícito‒ dentro del cual pensar, esto es, producir conceptos ajustados a “objetos” más o menos concretos, teniendo siempre en cuenta que no se trata de lograr el conocimiento efectivo de los mismos (tarea de las ciencias), sino de establecer sus condiciones de posibilidad gnoseológicas. Es en este momento teórico donde las diferentes filosofías despliegan sus correspondientes sistemas categoriales, que las caracterizan tanto como sus intentos de fundamentación última; pero son dichos sistemas los que establecen su “praxis teórica” y su “efectividad intelectual”, mucho más que esos intentos, de modo que este momento es particularmente delicado. Tendríamos que ver ahora, consecuentemente, el desarrollo categorial del método topológico. No obstante, no es eso lo que voy a exponer; se me tendrá que disculpar que deje esa exposición para otro momento y que me dedique en esta ocasión al examen de los procesos generales de pensamiento que conducen a la obtención de dicho marco; que subyacen, de hecho, a todo sistema gnoseológico. Mencionaré tan sólo las categorías indispensables para la exposición del asunto [...]
Una nueva aproximación a una antigua forma de pensar.