
18/05/2025
El circuito de recompensa es un sistema clave en nuestro cerebro que nos impulsa a repetir conductas asociadas al bienestar y la satisfacción.
Cuando logramos algo significativo, cuando establecemos vínculos auténticos o cuando superamos desafíos, este circuito se activa y refuerza esas experiencias, facilitando que busquemos repetirlas. La liberación de dopamina en estas situaciones es un mecanismo que orienta nuestra atención y comportamiento hacia lo que consideramos valioso.
Sin embargo, es importante recordar que la motivación no se reduce a una simple reacción química. La manera en que interpretamos y valoramos nuestras experiencias depende de nuestra historia, contexto y objetivos personales. (Por eso, dos personas pueden reaccionar de forma muy distinta ante el mismo estímulo.)
En un mundo donde la gratificación instantánea y los estímulos superficiales están a la orden del día, comprender cómo funciona este circuito nos invita a reflexionar sobre qué hábitos estamos reforzando y qué tipo de motivación estamos alimentando.
Cuidar nuestra motivación significa más que buscar placer momentáneo; es construir proyectos que tengan sentido y que sostengan nuestro crecimiento a largo plazo.
¿Qué tipo de recompensas estás priorizando en tu vida?