
09/09/2025
CUANDO EL DOLOR HABLA
Tus límites son perfectos.
El respeto por ellos es el respeto que te doy.
Acepto tu manera de poder hacer las cosas y también la manera en la que no puedes hacerlas.
Ahora sin reproche hacia a ti te diré mis límites.
Mis límites son poder respetarte respetandome.
Mis límites son no dejar de ser yo ante ninguna circunstancia.
Mis límites son honrar cada parte de mi, las que me gustan y las que no, puesto que todas hablan de mi historia y necesidades emocionales.
Mis límites no desean personas que solo sepan estar en lo bueno sin poder escuchar mi intensidad, mis miedos o mi debilidad.
Y si, por supuesto que cuando pones límites si el otr@ no las entiende es su problema.
Claro que es mi problema.
El problema de estar muy cansada de exigencias de como debo ser y comportarme.
El problema de que pidan aceptación pero no me acepten.
El problema de estar cuando se me necesita pero a la carta de las necesidades ajenas.
Hace mucho que me prometí no abandonarme.
No dejar de ser yo por ninguna circunstancia.
Si te gusta mi todo estará perfecto y si no pues me encantan tus límites y los respetaré pero lo más importante para mí persona y mi propia dignidad es que me respetaré.
No soy lo que tu necesitas.
Soy un todo.
Como dice un refrán, “el que quiera que me compre y el que no que me venda “.
Cuidado con los límites.
Lo que no soportas del otr@ es lo que todavía no has aprendido amar en ti.
Y no, no todo vale.
Puedes poner los límites que necesites pero tienes que saber que si te importa a quien se los pones estas diciéndole a gritos NO TE SOPORTO y eso NO es AMAR.
Respeto tus límites. He demostrado respetarlos, ahora me toca a mi respetarme y esa es mi misión y mi problema.
-Ⓜ️ ©️-