11/11/2025
MÁS ALLÁ DE LAS PALABRAS
Cuando ustedes piensan en un yo superior y permanente, ya han reducido lo permanente a la fugacidad intrínseca en el pensamiento. Cuando suspendemos el lenguaje y dejamos de pensar en las palabras o de verbalizar pensamientos, hemos liberado a la mente de su aspecto conocido y nos abrimos al aspecto desconocido y silencioso de la mente, que es inmensamente más rico y más profundo. Si pensamos en Dios estamos reduciendo lo eterno a lo fugaz. Podemos conversar sobre la Percepción Unitaria, que es suspender el lenguaje y percibir todo lo perceptible al mismo tiempo. Pero conversar sobre lo que existe más allá de ese silencio vivo y profundo, bello y creativo, es volver a crear más palabras inútiles. En el profundo silencio de la Percepción Unitaria uno está solo, pero no se siente aislado o alienado. En Percepción Unitaria uno está en comunión con el cosmos y con la humanidad. En ese silencio de comunión no están las palabras que sobrevaloran a Rubén, ni el nombre de cada uno de ustedes. Hay que mirar con el ojo y escuchar con el oído sin las palabras que deforman o interrumpen el mirar y el escuchar.
De esa manera es también posible contemplar la totalidad del funcionamiento de la mente, de hecho en hecho, a cada instante del día y sin palabras. En paz. Pudiendo estar en paz o hacer o decir algo, elegimos invariablemente hacer o decir algo (pensando o hablando). Nos ocupamos, recordamos y nos pre-ocupamos o planeamos aún cuando este mismo ES el momento de estar en la mente silenciosa y en paz. Esto es continuar en la experiencia conocida, la vida imaginaria. Esta continuidad no finaliza jamás (aunque pueda finalizar en la paz de la Percepción Unitaria). Esta genuina paz energética es el fuego que quema hasta las cenizas. Lo que somos son esas cenizas de recuerdos, fantasías e imaginación. Lo que somos es lo que puede terminar y al terminar eso, estar en paz, pero elegimos continuar en lo que somos.
En la Percepción Unitaria no queda nada de lo que somos, excepto lo que los otros continúan recordando de nosotros y que, al escucharlo, se reifica, se rehace, en nosotros mismos. Estos recuerdos mutuos de lo que somos son parte de la hipnosis colectiva que nos mantiene como somos y en lo que somos. La salida no es salir. La salida es la Percepción Unitaria. Nuestras preguntas y respuestas esconden el fuego que no deja nada de lo que somos.
Rubén Feldman González
https://linktr.ee/percepcionunitaria