
26/06/2025
En el camino de sanar, no solo enfrentamos lo que nos hicieron… también lo que hicimos.
Reconocer que hemos herido —a veces sin querer, a veces por no saber hacerlo mejor— no es motivo de culpa eterna, sino un acto de honestidad y madurez.
Aceptar esta parte de nosotros es esencial para crecer, reparar y vivir con mayor conciencia.
💬 ¿Te has encontrado con esta verdad en tu proceso de crecimiento?