Ludens alude a quien realiza el acto de jugar, entendiendo que este acto es siempre un acto vital y creativo que se opone y se resiste a la destrucción y a la muerte. Lo lúdico relacionado al juego y a quien lo juega, sirve aquí para poder pensar en la cualidad eficaz de integrar en un acto como el juego, la condición de lo regular y lo ir/repetible. Aunque muchos asocian la idea del juego a algo
intrascendente y banal, lo lúdico es un elemento fundamental de la cultura y va más allá de lo intrascendente, pues además de remitir al gusto y al colorido de lo superficial, lo lúdico despliega también la profundidad y la seriedad con la que se asume una apuesta en la que alguien no tiene más opción que jugarse la propia vida. El juego es la posibilidad infinita de emprender un mismo acto bajo las mismas reglas para alcanzar un desenlace impredecible. El acto analítico es una apuesta vital para la solución de conflictos 8psiquicos) emocionales que aquejan a un sujeto y que le impiden realizar sus propósitos. Esta experiencia conocida también como psicoanálisis se basa en el encuentro regular de dos personas (analista y analizando) quienes establecen un acuerdo para ceñirse a las disposiciones regulares y estables de tiempo, lugar, costo y neutralidad en el marco de un dispositivo donde se pondrá en juego la palabra y la escucha. La historia de cada sujeto narrada por su propia voz despliega toda serie de caminos, veredas, libramientos, vericuetos y/o laberintos. El sujeto expone certezas, fantasmas, deformaciones, malos entendidos y miedos. Cuando un sujeto anda mal todos estos elementos hacen trampa, sirven de coartada para mantener a las personas atrapadas en una repetición que parece no tener salida. La terapia psicoanalítica con su cualidad de lo eficaz produce un resultado único, inédito e irrepetible para cada caso y sujeto que consulta. El analista tiene la encomienda de escuchar los contenidos inconscientes a partir de lo que el analizando narra en actos, palabras y silencios con las que arma su discurso. El analista aporta una puntuación distinta a esa producción discursiva, esta nueva puntuación que el analista hace, facilita para el analizando la apertura de nuevos cauces y nuevas salidas. La vida es una batalla lúdica para construir nuevos cauces y nuevas formas que neutralicen toda fuerza o manifestación destructiva que surja dentro de ella. Lo lúdico es entonces la vida porque refiere lo creativo, el re-inicio, el impulso y el movimiento. La muerte en oposición a la vida es lo destructivo, lo inerte, lo acabado. La terapia psicoanalítica como el juego es la ocasión de desplegar una experiencia vital que permita equilibrar el peso de la vida y la muerte en la que el sujeto bascula.