14/04/2021
¿Cuántas calorías necesitamos al día?
Parte 1
El G.E.T. (gasto energético total), es la suma del gasto energético basal (G.E.B.) o metabolismo basal (M.B.), la actividad física (A.F.), el efecto termogénico de los alimentos (E.T.A.) y el NEAT.
El gasto energético basal (G.E.B.) o metabolismo basal (M.B.): es la energía que una persona necesita estando en reposo. O dicho de otro modo, las calorías mínimas que el cuerpo necesita diariamente para seguir funcionando. Estas necesidades mínimas son las que van a mantener el correcto funcionamiento de todos los procesos vitales del organismo.
Se puede ver alterado al padecer alguna enfermedad o trauma severo en el organismo.
A menos que seas un atleta de alto rendimiento (cof cof* solamente levantar pesas no es alto rendimiento), el G.E.B. representa la mayor parte del gasto energético total de una persona promedio.
Gasto por actividad física (A.F.): es el gasto energético de actividades físicas planeadas que consideramos como ejercicio (ir al gimnasio, practicar algún deporte, correr, etc).
Efecto termogénico de los alimentos (E.T.A.): a grandes rasgos, cuando comemos, se gasta algo de energía (calorías) para digerir, absorber y almacenar los nutrientes de los alimentos que hemos consumido.
NEAT (non-exercise activity thermogenesis): se refiere al gasto energético que tiene nuestro cuerpo al realizar cualquier actividad no considerada como ejercicio físico (caminar, subir escaleras, trabajar, limpiar la casa, etc). Junto al G.E.B., representa la mayor parte de las calorías totales consumidas al día en una persona promedio.
Por lo tanto, el gasto energético total (G.E.T.) varía de persona a persona, dependiendo de su composición corporal, genética, género, medidas antropométricas (altura, peso, diámetros, circunferencias, % de grasa) y actividad física.
Poco se puede hacer para modificar nuestro M.B., pero el hecho de que posiblemente tenemos una A.F. y NEAT diferente cada día de la semana, significa que nuestro G.E.T. podría variar cada día y no es un simple número constante como se suele pensar, dichos parámetros deberán ser calculados y controlados para un resultado efectivo.
Esto es una pequeña introducción para entender por qué un plan de alimentación debe ser completamente personalizado, adecuado a tus necesidades y también a tus gustos, no un copiar-pegar de la dieta de tu influencer favorito, ni lo que te recomendó la vecina de tu “club de nutrición”, ni la misma dieta que le da tu “coach” a todos los que se le paran enfrente, inclusive tampoco la dieta que le dió un nutriólogo a un amigo o familiar tuyo, ya que esta fue realizada de acuerdo a las necesidades y objetivos de esa persona, no tuyos.